El Guada revive su día de la marmota (0-1)

Nada. No hay forma. No hay manera de que el Guadalcacín se asiente en el Antonio Fernández Marchán para recobrarle el pulso a la categoría y poder salir de los puestos de descenso. Ayer volvió a dejar pasar por delante una nueva oportunidad para abandonar uno de los cinco puestos de descenso. Los resultados de los rivales acompañaron y una victoria frente al Coria hubiera dejado a los jerezanos en la 14ª posición. Pero no. Imposible. Una jornada más y una jornada menos.

El guión de la película que este año tiene como protagonista al Guada en Tercera División debe ser primo del autor de Atrapado en el Tiempo, aquella película en la que Bill Murray estaba condenado a repetir el mismo día... el día de la marmota.

Una semana más, y van unas cuantas, se mezclaron los mismos ingredientes: claras ocasiones de los locales, paradones del portero visitante y un arbitraje que en el momento preciso desniveló la balanza del lado contrario. La clave del partido estuvo en el minuto 9 de la segunda parte. Chico le ganó la posición a Paco Castillo y éste sacó el brazo lo justo para desequilibrarle. El castigo fue el más severo: penalti y expulsión. Lebrón adivinó el lanzamiento de Juan Antonio, pero al rechace acudió Chico antes que cualquier defensa guadalcacileño, fusilando a un meta local que no había acabado de recobrar la verticalidad.

Claro que el partido habría tomado un signo bien distinto si el Guadalcacín hubiera aprovechado las ocasiones que tuvo en la primera mitad. No se había llegado al minuto de juego cuando Luisma desperdició el primer regalo de la zaga coriana. Lebrón cedió de cabeza hacia su portero sin percatarse de la presencia de Luisma. El atacante jerezano tuvo tiempo de pensar el remate, quizá demasiado. Vio a Isco adelantado y seguramente dudó entre hacerle una vaselina o ajustar a un lado. Al final, lo que hizo fue chutar mansamente a las manos del portero.

El Guada presionaba bastante arriba y no tenía demasiados problemas para traspasar la defensa del Coria. Sus dos centrales tuvieron muchos problemas ante el trabajo de Borja y daba la sensación de que todo era cuestión de que cayera el primero. Antes de que se cumpliera el minuto diez, los locales tuvieron otra ocasión inmejorable para ponerse por delante. Alfonso abrió a la banda derecha por donde entró Jesús hasta la línea de fondo, centró al corazón del área y Piñero, entrando desde atrás, remató algo forzado con la zurda, marchándose el balón muy cerca del larguero.

El Coria respondió a los veinte minutos con un lanzamiento de Abraham al que Lebrón contestó con una gran intervención. Fue lo único que hizo con peligro el equipo sevillano en toda la primera mitad.

Por contra, los locales acentuaron su dominio y antes de la media hora Piñero se quedaba solo ante Isco. El portero estuvo muy rápido y abortó la jugada lanzándose a los pies del punta jerezano. Más clara fue aún la siguiente y que obligó al meta a emplearse a fondo. Piñero sacó una falta desde la banda derecha y Diego Galiano, absolutamente solo, remató en plancha. Cuando el gol ya se cantaba en la grada apareció la mano salvadora de Isco, mandando el balón a la esquina. Y tras el córner, Paco Castillo remató en el segundo palo y el Guada reclamó penalti por manos de Lebrón. El árbitro dejó seguir.

La segunda mitad arrancó con dos saques de esquina del Guadalcacín que mostraron las intenciones de los locales.

Sin embargo, todo se torció minutos más tarde con el penalti y la expulsión de Paco Castillo. Chico hizo el 0-1 y al Guada, como tantas veces esta misma temporada le tocó intentar la remontada. Con uno menos, Ismael retrasó a Luis Castillo y posteriormente refrescó la banda izquierda dando entrada a David y a Martel. De poco sirvió porque el lateral no se caracteriza por sus subidas y el punta entró poco enchufado. Corral sustituyó a Jesús pero el peligro siguió llevando la firma de Diego Galiano. El central remató de cabeza a las manos de Isco tras una falta lanzada por Piñero y a falta de siete minutos tuvo la ocasión más clara de la segunda mitad. Borja le buscó entre los centrales, el central consiguió zafarse y delante de Isco no supo definir.

Con el Guada lanzado en ataque y con sus líneas abiertas, el Coria pudo sentenciar a la contra en un par de acciones aunque la más peligrosa la protagonizó de nuevo Galiano en una cesión de cabeza de espaldas a su portero a la que Lebrón respondió con un paradón sacando el balón de la escuadra.

Por sacar algo positivo de la derrota, el Guada sigue a un punto de la salvación y ahora afronta dos choques en cuatro días. El miércoles (20:00) juega contra el Cabecense -un rival directo al que tiene a dos puntos- y el domingo (12:00) recibe al Recreativo B.