Programación Guía completa del Gran Premio de Motociclismo en Jerez

MOTOCICLISMO. campeonato del mundo motogp

Lorenzo opta a un título antipático

  • El duelo entre el español y el piloto más laureado de MotoGP cuenta con una afición multinacional a favor del italiano

Jorge Lorenzo celebra su victoria en el GP de la República Checa en el podio junto a Rossi, tercero en Brno.

Jorge Lorenzo celebra su victoria en el GP de la República Checa en el podio junto a Rossi, tercero en Brno.

LA afición se rige básicamente por el corazón y domina un amplio territorio, en el que no hay espacio para la neutralidad. Si te llamas Valentino Rossi, llevas detrás a una de las aficiones más multitudinarias del planeta que, a la postre, destila también la antipatía más universal hacia sus rivales. Imaginen que el título más buscado por el mítico piloto italiano se va al traste este año por culpa de su compañero de equipo, el español Jorge Lorenzo. Sin duda, la impopularidad de este último aumentaría con creces, porque si hay algo que los 'tifosi' llevan mal, son las decepciones. Y ésta sería tan elevada, como multinacional.

En honor a la verdad, la lucha por la corona de MotoGP despierta esta temporada muchas paradojas, que superan incluso lo estrictamente deportivo. Por lo general, siempre se ha esperado que un joven piloto 'jubile' a un mito ya legendario, ¿recuerdan la interminable batalla de Crivillé con el pentacampeón Doohan? Pero ahora ocurre exactamente al contrario. La gran mayoría de aficionados sueña con que el veterano Rossi, de 36 años y heptacampeón de MotoGP, vuelva a reinar mal que le pese al veinteañero bicampeón Lorenzo. Y en eso andan enzarzados las dos estrellas del Movistar Yamaha que, a seis pruebas para el término de Mundial, se encuentran separados por sólo 12 puntos, a favor del italiano.

Con Marc Márquez apeado ya de la pelea por el título, el morbo se centra en quién se llevará el gato al agua en la cilindrada reina. Y eso es ya sólo cosa de dos: un Rossi versus Lorenzo, los dos en el mismo 'gallinero' y con la olla ardiendo. Un duelo sin precedentes que este domingo cumplirá uno de sus seis últimos capítulos en territorio hostil para el mallorquín, con las gradas de Misano abarrotadas por la marea amarilla que apoya al ídolo transalpino. Pero eso sí, los dos rivales saben que no habrá un veredicto hasta la prueba definitiva de Valencia el 8 de noviembre.

¿Quién ganará este pulso apasionante? Quizá la pregunta más correcta sería ¿quién tiene más opciones? Para responder ambas cuestiones, podemos dejarnos llevar por el corazón, o analizarlo desde parámetros que no estén influenciados por las emociones. Siendo honestos, el ídolo planetario que es Rossi no ha tenido, en estos seis últimos años, una oportunidad más clara de alcanzar su octavo título mundial de la máxima categoría, en la que lleva la friolera de quince años, siete más que su oponente español. Es decir, más experiencia que él, nadie posee. Además, puede que ésta sea la última ocasión que el genio de Urbino tiene, a cuatro años de cumplir los 40, de lograr el que sería décimo título de su inigualable carrera deportiva, que equipararía a la de Giacomo Agostini.

Valentino está protagonizando una temporada impecable. En las doce pruebas disputadas, siempre ha estado en el podio, cuatro de ellas en lo más alto, dos veces en el segundo peldaño, y seis en el tercero. Jorge, por contra, no ha mostrado tanta regularidad pues, aunque ha ganado cinco veces (cuatro de ellas consecutivas), sólo suma otros dos podios más, cuatro cuartos puestos y un quinto. Es decir, el italiano se muestra infalible y estratega, mientras que el español, o bien arrasa, o queda algo rezagado. Los números no engañan.

Hasta la pasada carrera de Inglaterra, Rossi estuvo esperando un nuevo 'pinchazo' de su rival, que finalmente llegó, al quedarse apeado del podio y viendo como 'Il Doctore' triunfaba bajo la lluvia y recuperaba el liderato del Campeonato. Un gran mazazo psicológico, quizá decisivo, que obliga a Lorenzo a reforzar su estrategia de ir al límite y marcharse a la fuga, como bien sabe hacer. Esa es su gran baza, tal vez la única, pues el cuerpo a cuerpo no parece irle tan bien como a su astuto y duro contrincante, más acostumbrado a ir de menos a más en las carreras.

A priori, Rossi y Lorenzo tienen la misma moto. Pero, ¿quién será capaz de sacarle el mayor partido? Está claro que, a diferencia de las Honda que pilotan Márquez o Pedrosa (árbitros de este partido), las Yamaha parecen ir sobre railes, como los famosos trenes bala japoneses que nunca descarrilan, circulando a más de 300 kilómetros por hora. De ahí que, tanto Valentino como Jorge, jugarán con idénticas armas y puede que lo hagan más al límite de lo que hemos visto hasta ahora, pues no hay que olvidar que prácticamente ninguno ha sufrido caídas en lo que va de año.

Pese a los doce puntos que les separan y los 150 que aún hay en juego, Lorenzo se muestra seguro de sus posibilidades, gracias a una moto que le otorga gran confianza. En entrenamientos, Jorge suele mostrarse superior, no comente errores, ni parece vulnerable al pánico o la guerra psicológica. En sus salidas de carrera, el piloto español intenta poner tierra de por medio y, precisamente ahí, puede estar su gran baza para alcanzar un título que, aunque merecido, puede ser antipático...

(*) Jesús Benítez es periodista y escritor. Fue editor jefe del Diario Marca y, durante más de una década, siguió todos los grandes premios del Mundial de Motociclismo. A comienzos de los 90, ejerció varios años como jefe de prensa del Circuito de Jerez.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios