Manolo Fernández no se va a presentar a las elecciones en el Atlético Sanluqueño y 14 años después deja de ser presidente de la entidad verdiblanca. Así lo anunció en la pasada asamblea extraordinaria de socios celebrada hace unos días en la que el club abría proceso electoral. La directiva no ha querido perder más tiempo y tras lograr la permanencia ha puesto en marcha el proceso electoral.

De esta manera, el calendario electoral ya en marcha. El censo electoral, compuesto por 840 socios mayores de 18 años, se expondrá en la sede del club hasta el próximo 3 de junio, dejando los días 4 y 5 para posibles impugnaciones. La presentación de candidaturas será del 7 al 18 de junio y, si no hay impugnaciones, y hay más de un candidato, el 21 de junio serán las elecciones, aprobándose en la asamblea el horario fijado para votar, de 21:30 a 23:0 horas del citado día 21. Si no hay reclamaciones, el día 24 se procederá a la proclamación del nuevo presidente y junta directiva. En caso de que sólo haya un candidato, éste quedaría proclamado presidente el mismo día 21. Para optar al cargo, cada candidato deberá presentar un aval del 10 por ciento de socios, es decir un mínimo de 84 apoyos.

El todavía presidente verdiblanco aseguró en la asamblea celebrada en Bodegas Barbadillo que el club seguirá funcionando igual hasta el momento del cambio de poderes: "Estaremos gestionando hasta el último día porque el club no va a parar".

El dirigente aseguró que existen varias partidas por ingresar y que se continúa trabajando para poder poner a día a la plantilla y al cuerpo técnico, resaltando que Abel Gómez está renovado tras haber mantenido al equipo en Segunda División B.

Fernández, en el programa Tribuna Deportiva de Costa Noroeste, hizo este lunes un repaso a su etapa en el Atlético Sanluqueño, recordando los tres ascensos a Segunda B logrados en su mandato. Reconoció que el más especial fue el primero, con Pepe Carrete en el banquillo, "porque fue algo que le prometí a mi padre antes de que fallecería".

Igualmente, Manolo Fernández aseguró que el momento más duro fue "el último descenso a Tercera, porque fue totalmente injusto, robado" y tampoco guarda buenos recuerdos de cuando "tuve que comunicarle a Rafa Carillo, un caballero del fútbol, que no podía seguir al frente del equipo".