Orgullo de campeón

Una victoria cómoda frente al Rosenborg noruego, resuelta con goles del uruguayo Diego Godín, del argentino Sergio Kun Agüero y del brasileño Diego Costa, reactivó al Atlético de Madrid en la Liga Europa, en un duelo sin brillo, pero también sin sufrimiento para el conjunto rojiblanco.

No falló el equipo madrileño, que conquistó un triunfo imprescindible para sus opciones de clasificación para los dieciseisavos de final del torneo. Ya suma cuatro puntos en el grupo B, en el que ha pasado del último puesto a la lucha por el liderato, con el Bayer Leverkusen como principal obstáculo hacia ese objetivo.

Ni siquiera las ausencias en el once de David de Gea, con una contractura y sustituido en la portería titular por Joel Robles, y del argentino Agüero, de inicio como suplente tras superar una rotura de fibras en el glúteo, minimizaron las enormes diferencias entre uno y otro equipo.

No hubo dudas de que el Atlético es más potente, tiene más talento y posee más cualidades. Y lo plasmó desde el pitido inicial.