El Guadalcacín FSF cae ante el potente Burela, pero despide la liga con la cabeza alta (3-1)

El Guadalcacín FSF ha cerrado este sábado una temporada 24/25 sobresaliente y con la cabeza alta en su regreso a la Primera División Femenina. Con la permanencia atada desde hace varias jornadas, ha podido disfrutar y afrontar con tranquilidad las últimas jornadas. Su gesta, teniendo en cuenta sus recursos, es enorme. En su último compromiso, se enfrentaba al Burela -las jugadoras realizaron el desplazamiento de casi dos mil kilómetros ida y vuelta en autocar y durmieron en él-, que peleaba por atar la segunda plaza de la clasificación para luchar en el play-off por el título con ventaja de cancha en la primera eliminatoria, compitió, dio la cara y cayó por 3-1. Las gallegas (79 puntos) se medirán al Futsi Atlético Navalcarnero, que fue tercero (77 puntos).

El cuadro burelés necesitaba ganar para atar su primer objetivo, entró fuerte al partido y el equilibrio inicial lo rompió con un disparo cruzado Dinha, que sorprendió a la portera visitante, tras un pase de Emilly. 1-0. Minuto 2. Gleice y Nekane hacían emplearse a fondo a Ana Eliza, dejando claro que el Guada FSF quería despedirse con buenas sensaciones. Al igual que en otros compromisos, sin complejos y tuteando a las locales, las de Andrés Sánchez perdonaron.

Las gallegas apretaban para ampliar su ventaja, pero su segunda diana no llegó hasta el tramo final de primer tiempo, cuando un libre directo raso de Antía Pérez acabó dentro. Todavía hubo tiempo para más, un jugadón de Ame Romero, con eslalon incluido, lo resolvió la internacional gaditana con un zapatazo a la escuadra. 2-1 y el Guadalcacín FSF se metía de lleno en la lucha.

Tras el paso por vestuarios, Caridad y Paola tomaban las riendas del protagonismo y comenzaron a generar bastante peligro, hasta que Cilene, aprovechando un error en la salida de balón de las de Andrés Sánchez, anotaba el 3-1 en el ecuador del segundo acto. La escuadra lucecnse buscó el tanto de la tranquilidad ante un adversario que se aferraba al partido y que arriesgó en los últimos compases con el juego de cinco, pero que no pudo recortar distancias.