No fue suficiente la ceremonia y fiesta de dos días de celebración los pasados 2 y 3 de junio. Carlota Casiraghi, hija de Carolina de Mónaco, y Dimtri Rassam han celebrado en este sábado su ceremonia religiosa para dar el sí en una abadía de la idílica localidad francesa Saint-Rémy-de-Provence. La fecha además es la de la primera boda de Carolina de Mónaco con Philippe Junot y precisamente la novia ha elegido un romántico vestido de Giambattista Valli, de estilo vintage.
En esta ocasión la novia optó por un modelo bucólico de manga y escote de hombros caídos con bordados de flores y volantes en la falda, discretos complementos y un ramo de lavandas, muy adecuado en el entorno de la campiña provenzal y la monumental estampa de la abadía Sainte-Marie de Pierredon. Dimitri lucía traje blanco y chaleco gris.
Carlota sorprendió en su boda civil con un modelo de Yves Saint Laurent. En el primer enlace del pasado día 2 la hija de la princesa Carolina optó por un modelo en gris perla para la boda que se inspiraba en el que lució su abuela en el enlace civil con el príncipe Rainiero en 1956.
A continuación, en la fiesta nocturna, la novia eligió un conjunto de Chanel que también evocaba la estampa de la recordada actriz y posterior soberana monegasca.
La celebración de la pareja se hizo de rogar y la hija mayor de Carolina, de 32 años, por fin ha visto cumplido el deseo de oficializar su enlace con el productor de cine Dimitri Rassam, cinco años mayor que ella.
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