La calle Cabezas se corta al tráfico por riesgo de derrumbe en una finca

La Policía Local y el Área de Movilidad procedieron ayer al corte del tráfico peatonal y de vehículos en la calle Cabezas, como medida preventiva de emergencia ante el estado de precariedad que presenta el muro de la fachada lateral de una finca situada en el número 1 de la Plaza del Mercado, en la que ya se habían producido otros desprendimientos, el último la pasada semana, un hecho que fue advertido por la asociación de vecinos del Centro Histórico, alertando de que la fachada estaba en muy mal estado y que la calle además es de continuo tránsito de personas y vehículos. De hecho, en aquel momento se requirió la presencia de los bomberos que acordonaran la zona.

Ayer por la mañana técnicos del servicio de Disciplina de la delegación de Urbanismo fueron a inspeccionar la finca tras recibir el aviso de la Policía Local de que se había producido un nuevo desprendimiento en el muro lateral del inmueble, que da a la calle Cabezas, "por lo que, ante el peligro que supone el estado de precariedad de este muro, y el riesgo de que se produzcan nuevos desprendimientos, han ordenado el cierre de la calle tanto para vehículos como para peatones", señalaron desde el Ayuntamiento.

El delegado de Urbanismo, Agustín Muñoz, explicó que esta finca es de propiedad privada, por lo que el Ayuntamiento "procederá a tomar las medidas correspondientes para que ésta realice las actuaciones oportunas ante el deterioro progresivo del muro lateral, en el que se están produciendo los desprendimientos". Muñoz agregó que tras adoptar como primera medida el cierre de la calle, se seguirá trabajando "para que las condiciones del muro se recuperen y se elimine el peligro al objeto de poder reabrir la calle en el menor plazo de tiempo posible".

El área de Movilidad ha establecido un plan de tráfico alternativo, consistente en que los vehículos procedentes de la plaza Belén en sentido a calle Cabezas-Plaza del Mercado, serán desviados por calle Benavente Alto (que cambia de sentido de circulación de manera provisional) en dirección a San Ildefonso, San Blas y plaza del Mercado. Los residentes de plaza San Lucas y adyacentes podrán realizar su entrada y salida por plaza de Belén hacia calle Benavente Alto.

Asimismo, se procederá desde Movilidad a la colocación de la señalización correspondiente de las incidencias del tráfico.

El presidente de la asociación de vecinos del Centro Histórico, Alejandro González, señaló ayer que el inmueble en el que se están produciendo los derrumbes es el conocido como la Casa del Cura, que forma parte de la misma propiedad que el Palacio de San Blas, del que hace tiempo vienen denunciando su estado de abandono. La asociación lamentó que se lleguen a estas situaciones y desconfió de que el cierre de la calle Cabezas sea sólo provisional. De hecho recordó que la calle Liebre, donde también se produjo un derrumbe lleva dos semanas cortada, "e incluso ya han colocado la correspondiente señalización fija prohibiendo la entrada. Nos tememos que sean calles que no vuelvan a reabrirse", indicó González. No ocultó tampoco las molestias que ocasionan estos cierres de calles a los vecinos, en concreto el de Cabezas para los niños que acuden diariamente al colegio de San Juan Bosco.

Hace solo una semana que la asociación había remitido una carta a la delegación de Urbanismo expresando su malestar por el estado de abandono en el que se encuentra el centro histórico y pidiéndole al Ayuntamiento que actué ya y obligue a los propietarios de los inmuebles a mantenerlos en buenas condiciones. González mostró su preocupación por que nuevos derrumbes provoquen daños personales, en cuyo caso -opinó- habría que responsabilizar no sólo a los propietarios sino también al Ayuntamiento.

En estos momentos, y tras la reapertura de la calle Vid, en el centro histórico están cerradas por los riesgos de derrumbes de inmuebles en mal estado las calles Cabezas, Liebre, Pilar, Melgarejo y San Blas.

La asociación de vecinos se ha mostrada partidaria de que se convoque una mesa extraordinaria del centro histórico para abordar únicamente el tema del deterioro de muchas de las fincas y que se intervenga cuanto antes, sin esperar al 'plan urban' que el Ayuntamiento tiene previsto solicitar para estos barrios.