El Club Nazaret reina en verano

Ocio

Las instalaciones hacen del Club un lugar propicio para pasar el estío con la familia. Cada detalle cuenta para una junta directiva que se vuelca en la búsqueda de nuevas actividades para sus socios.

El Club Nazaret reina en verano
El Club Nazaret reina en verano
Domingo Díaz

Jerez, 18 de agosto 2015 - 01:00

En uno de los salones del Club Nazaret, la hija mayor de la familia estudia gracias a la tranquilidad reinante. Mientras tanto,su hermano pequeño se lanza a la piscina junto a sus amigos para comenzar la primera carrera a nado de la jornada, pues hasta que las fuerzas aguanten, el agua es el mejor lugar para combatir el calor a la vez que se juega. Los padres, por su parte, charlan amistosamente mientras toman un refresco en el bar después haber realizado ejercicios en el gimnasio.

Esta situación podría estar describiendo a cualquier familia que estuviera disfrutando en las instalaciones del Club Nazaret, cuyas instalaciones permiten realizar múltiples actividades durante el periodo estival. 'El Club', como es conocido popularmente entre sus socios, ofrece más actividades si cabe para que sus asociados puedan disfrutar de unas vacaciones agradables.

Las instalaciones abren sus puertas todo el año y tienen muchos atractivos, cuentan con campo de minigolf, pistas de tenis, fútbol sala, campo de fútbol playa, canchas de baloncesto, gimnasio... Pero cuando el calor aprieta, la piscina se convierte en la reina. Tres piscinas esperan a los socios, una pequeña, una mediana y un vaso con dimensiones olímpicas. Al final del estío de cada curso, se cuentan por miles las personas que se han acercado.

Y es normal, pues 'el Club' cuenta con más de 12.000 asociados, siendo alrededor de 2.500 familias al completo las que disfrutan de todas las ventajas de pertenecer a él. Para la junta directiva, estos socios son lo primero y siempre mira porque estén muy a gusto con todo lo que ocurre de puertas para adentro; al fin y al cabo son ellos, los abonados, los que financian con su cuota casi todo lo que allí dentro ocurre.

Mucho se mima cada detalle. El catering que estaba anteriormente no cumplía con los objetivos que se creían precisos y se decidió rescindir el contrato para que fuese el Club quien se hiciera cargo de prestar los servicios, conservando a casi toda la plantilla que allí trabajaba. Esto no indica una mayor rentabilidad y pudo traer un problema grave con la concesionaria, sin embargo, se tomó una decisión difícil que se acabó saldando, según Manuel García Perdigones, presidente electo de la entidad, "con un coste mínimo". Ahora, con esta nueva situación, los responsables creen que "damos ese toque que le costaba dar a la concesionaria" y se muestran contentos con los resultados obtenidos: "Lo dicen los números de asistencia, lo dicen el número de cafés, el número de servicios que se prestan; lo hemos aumentado todo considerablemente. El repunte ha sido bastante bueno, al margen de que siempre está quien te lo dice personalmente", señala Perdigones.

Otro de los aspectos que se están mejorando en estos momentos es la renovación de las tarjetas que permiten la entrada a los socios. Se les está colocando una foto para poder identificar a aquellas personas que acceden a través de los tornos. Aunque en principio se puso una fecha máxima para hacer la renovación, en el Club se dieron cuenta de que era un trabajo costoso y han decidido ampliar el plazo de forma ilimitada, al menos hasta que la mayoría de asociados haya recogido su nuevo carné con imagen identificativa. Desde la junta directiva veían esto como algo muy necesario, pues además de evitar la picaresca en mayor medida, renueva el archivo del Club donde, según afirma el presidente Perdigones, "tenemos fotos de niños de tres o cuatro años que ya son hombres y mujeres".

Otro de los propósitos marcados para mejorar en las próximas fechas es continuar con la renovación de instalaciones. El Club cuenta con 46 años de historia y el paso de los años se va haciendo notar poco a poco, por lo que se esperan retocar algunas pistas antes de que su estado empeore.

No obstante, para proyectos como el mencionado en último lugar se necesita bastante dinero y el club, con la crisis, ha notado en los últimos tiempos la reducción de ingresos. A pesar de que las cuotas de los socios no son el único dinero que entra en las arcas del club social -patrocinadores se anuncian en las instalaciones, se organizan torneos, tanto internos como externos...- se ha notado bastante la reducción del número de abonados en al menos un10%. Desde la entidad se asegura que con ese "10% íbamos sobrados", pero sin él "nos cuesta llegar a final de año".

Aunque el dinero no sobre, lo importante, tal y como se demuestra en sus actos, siguen siendo los socios, por lo que desde la junta directiva se juega para hacer encaje de bolillos y que cada verano todos disfruten de distintas actividades, tanto culturales como deportivas.

Cuando el sol aprieta, el colegio acaba y las vacaciones llegan, el Club Nazaret se convierte en un lugar idílico para pasar el verano sin tener que salir del corazón de Jerez.Es el momento en el que todos quieren ir al Club.

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