El pasado domingo a primera hora de la mañana la hermandad del Desconsuelo salía de su histórico templo de San Mateo para rezar el piadoso acto del rosario mientras peregrinaban hasta la basílica de la Merced donde la hermandad de los Judíos pretendía ganar las indulgencias al pasar por la puerta jubilar mercedaria.
Este cortejo estuvo presidido por Nuestra Señora del Desconsuelo en un encuentro muy emotivo que se pudo vivir frente a la Patrona la Virgen de la Merced Coronada. Un precioso momento que protagonizaron los cofrades de San Mateo.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios