Dios Madre

A la vuelta de la esquina

Francisco Reinoso

04 de mayo 2011 - 09:01

El pasado domingo se celebró el día de la madre. Es un invento comercial, pero no está de más tener un día que nos invite a reflexionar sobre la maternidad, las mujeres en general y la madre iglesia. Cualquier acontecimiento nos debe ayudar a la reflexión.

Nuestras manifestaciones de fe están llenas de devociones marianas: Divina Pastoral, Merced, Carmen, Cabeza, Regla, Milagros... Además de los pasos penitenciales con sus proporciones áureas.

La madre es la que espera al hijo descarriado, la que llora años la muerte del fruto de su vientre, la que acepta antes de nacer a ese hijo, la que acude a las Ampas, la que tiene además de su horario profesional el de su casa, la que es capaz de hacer dos o tres cosas a la vez, la que lleva al niño al médico... Me contaron que la madre de un joven metido en la droga, ante el reproche de que su hijo estaba desvalijando la vivienda, alegó que no iba a permitir que su hijo tuviera que robar e ir a la cárcel para comprar drogas. ¡¡¡Es mi hijo!!! Gritó como una leona. No tenía razonamiento.

Pilar, Fernanda, José, volvimos a encontrarnos con Juana, todos ex alumnos del Coloma. Juana actualmente es directora de un centro del Opus Dei en Portugal. Mujer que renunciando a ser madre, tiene una maternidad amplia y fructífera. Entregada a la vía de la perfección por el camino del servicio. ¡Cuántas mujeres han renunciado a la maternidad por vivir su cristianismo de servicio a los demás! Sería injusto olvidarme de nombres, pero tengo que reconocer a Toñi, María, Hortensia, la fallecida Rosa Roig, Consuelo, Manoli Guerrero, Sor Agustina, Soledad O´Neales, y muchas más que no recuerdo sus nombres.

Madres como Teresa, viuda con cinco niños, de Cuartillo, que cuando uno se ponía enfermo, lo llevaba al médico en Jerez en brazos y andando, no había dinero para autobús. Como mi amiga Lola, madre soltera que saca a su hijo adelante y además estudia y trabaja.

Dios es más Madre que Padre, Dios no tiene sexo, pero los pintores varones lo presentan como Zeus. En sus manifestaciones de cariño y acogimiento es mas madre. Repasen la actitud del padre en la historia del Hijo Pródigo: es una actitud maternal la que se reconoce en sus actos.

Los templos están llenos de mujeres, y la Madre Iglesia, teniendo mayoría de mujeres entre sus creyentes, les da un papel secundario. Los varones ocupan el lugar de la responsabilidad, de las decisiones, de la representación, de la dirección. Recuerdo que en la Catedral jerezana en la ordenación de varios diáconos, el responsable catedralicio se opuso a que una mujer leyera los textos neo testamentarios, porque el Código de Derecho Canónico lo prohibía. La firmeza de la comunidad de San Juan de Dios le hizo cambiar de opinión, en ese momento. Los mandatarios eclesiales tienen misoginia. Están lelos.

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