La Ermita de San Telmo se cerrará por el mal estado de las cubiertas
La hermandad planea su clausura tras la Semana Santa y llevar las imágenes titulares a otro templo
Alrededor de 300.000 euros puede llegar costar la obra que devolverá la estabilidad a las cubiertas de la ermita de San Telmo, afectada por la podredumbre de la viguería de madera, que además está fuertemente atacada por terminas. Este es el daño más grave que padecen los techos, algo de lo que era consciente la hermandad del Cristo de la Expiración pero hasta que no lo han comprobado inspeccionado la viguería que se sitúa sobre la bóveda de cañón del interior del templo y al observarse algunas evidencias que delataban que algo iba mal, no se han desatado todas las alarmas. Tanto es así que tras la Semana Santa se cerrará la ermita para, si es posible y el dinero lo permite, iniciar las obras de rehabilitación. Incluso, esa clausura podría llegar a adelantarse si los técnicos, que ya inspeccionan las cubiertas, lo aconsejan, eso sí, si ven evidencias claras de algún peligro como el derrumbe. Lo que sí está meridianamente claro es que una vez que pase el Viernes Santo, la hermandad trasladará a sus imágenes titulares a otro templo, barajándose varias posibilidades como que sea al convento de las monjas Clarisas de la calle Barja y la iglesia de San Miguel, como opciones más a la mano. Pero también se piensan en otras iglesias como la de San Rafael, estrechamente unida a la cofradía, e incluso la basílica del Carmen, que por cierto tiene muchas opciones. No obstante, la decisión final se tomará de acuerdo con el obispado. De forma paralela la hermandad piensa ya en las acciones a poner en marcha para recaudar fondos de cara a las obras, como festivales flamencos en los que quieren involucrar a artistas notables relacionados con la corporación y con el barrio de San Miguel. También pedirán ayudas y subvenciones, teniendo en cuenta que la obra a ejecutar no es sencilla y a buen seguro que muy costosa. Los primeros pasos que se han dado es poner el asunto en manos de expertos en arquitectura y en el tratamiento de xilófagos que están devorando la madera. De hecho, como se observa en la imagen que acompaña a esta información, los daños provocados por la termita está muy avanzados llegando en algunos lugares a haber destruido piezas completas de la estructura.
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