Icelandair ultima sus vuelos a Jerez para la próxima primavera

Las operaciones tendrán lugar entre el 17 de marzo y el 12 de mayo · Baraja otra tanda de conexiones para otoño

Manuel Moure / Jerez

19 de enero 2012 - 01:00

La aerolínea islandesa Icelandair ya tiene prácticamente cerrada una conexión entre la capital de este estado nórdico, Reykjavik, y Jerez para la próxima primavera. Según ha podido saber este medio, las operaciones que desarrollará la referida aerolínea se realizarán entre el próximo 17 de marzo y el 12 de mayo en forma de siete vuelos que traerán turistas a la provincia y sus consiguientes vuelos de vuelta. Un hecho especialmente destacable es que a estos dos meses de operaciones en plena primavera se unirían, si todo funciona como está previsto, otros dos meses en el siempre plácido otoño gaditano. Estos pasajeros, los islandeses, son especialmente partidarios de evitar los tórridos meses del sur de Europa. En total, si los planes se confirman, se trataría de unos 14 vuelos anuales, una cifra nada desdeñable para la actual coyuntura del aeropuerto jerezano, que busca ya superar con creces el millón de pasajeros.

Las conversaciones, tal y como se ha señalado, están muy avanzadas, tan sólo se espera que se confirmen los 'slots', o lo que es lo mismo, las reservas que permiten a una compañía ocupar de cierta forma una ruta aérea y reservar, lógicamente, su espacio en los aeropuertos de destino. A este respecto, cabe destacar que hasta el año pasado Icelandair había fijado su base de operaciones más meridional en la península ibérica en el aeropuerto internacional de San Pablo, en Sevilla, si bien acto seguido los pasajeros debían embarcarse en un autobús que les condujera hasta la provincia. El hecho de aterrizar en la misma provincia de destino ha tenido gran peso en las negociaciones llevadas a cabo.

Hay un hecho que no se puede obviar. El turista islandés suele ser un viajero de alto poder adquisitivo que, contra lo que podría pensarse, suele llevar la contraria al típico turistas europeo de sol y de playa. Así, por ejemplo, una característica destacable es que en los últimos años este turista del norte europeo ha huido de una forma clara de los hoteles de tipo resort (los típicos establecimientos residenciales en los que no 'falta de nada') para pasar a alojarse en hoteles de 'los de toda la vida', ubicados además en cascos urbanos. Se trata, según comentaron a este medio expertos en turismo, del gusto de estas personas "por entrar en contacto con la ciudadanía y sus modos de vida, lógicamente, conociendo de esta forma unos usos y formas de vida que son radicalmente opuestos a los que disfrutan en el norte de Europa".

stats