La Junta inicia la restauración del tramo del río Guadalete afectado por el incendio del pasado verano

El delegado territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta, David Gil, ha visitado los trabajos de restauración del tramo del río Guadalete afectado por el incendio del pasado 13 de julio y ha participado en la plantación de árboles en las proximidades de la barriada rural de Lomopardo. Le ha acompañado la delegada de Alcaldía de Lomopardo, Erika Torres, así como personal técnico del gobierno andaluz. Gil ha destacado que “esta plantación se enmarca en las tareas de restauración que se están desarrollando desde la Junta de Andalucía y que son necesarias para recuperar esta zona”.

En esta visita se ha informado de que, como resultado del siniestro acontecido el pasado verano, la vegetación de ribera resultó seriamente dañada en un tramo de unos 2 kilómetros del río Guadalete, inmediatamente aguas arriba del puente de Cartuja y en las cercanías de la barriada rural de Lomopardo. Las llamas del fuego actuaron sobre un arbolado, ya de por sí hídricamente estresado debido a las altas temperaturas, lo que finalmente causó daños severos que se han traducido en la muerte o en el grave debilitamiento de cientos de ejemplares afectados.

Restauración

La restauración impulsada por la Junta consiste, en primer lugar, en la retirada de todos los árboles que están severamente dañados, para evitar riegos de accidentes por caídas en un tramo de río muy visitado y, al mismo tiempo, favorecer la regeneración natural de la vegetación en el área afectada. También se trata de una medida preventiva para evitar que los árboles caídos puedan ser arrastrados por la corriente si se ocasionaran crecidas del río que pudieran causar daños en infraestructuras hídricas ubicadas río abajo.

Según informa el personal técnico, en función de la evolución de la zona se contempla la posibilidad de realizar futuras plantaciones que contribuyan a la recuperación de la vegetación natural. Un adelanto de ello es la plantación simbólica que se ha realizado hoy de varios ejemplares de álamo blanco, el árbol de ribera más característico en el bajo Guadalete.

Los trabajos que está llevando a cabo desde la Delegación Territorial de esta Consejería se han extendido por ahora a dos meses, y está prevista su continuación hasta finalizar la restauración del entorno.

Estas actuaciones se enmarcan en la encomienda actual con la empresa pública Tragsa para el mantenimiento y conservación de cauces en la provincia, que cuenta con un presupuesto de 2 millones de euros para el período 2021-2023.