"Minimalista la decoración pero no los platos, quiero hacer hincapié"

-El estilo de Prado es diferente.

-Lo que puedo decirle es que la filosofía del restaurante es muy clara: ofrecer una cocina tradicional e innovar en la presentación y la técnica de preparación de sus platos.

-¿En qué elementos innova más su negocio?

-En la 'confección' de los ingredientes, en el servicio personalizado que ofrece, y como no, en el estilo decorativo del recinto.

-Una decoración en la que priman los grandes espacios y la luz natural es un lujo, ¿sus precios también lo son?

-El principal objetivo de Prado es lograr la combinación perfecta entre precio y calidad.

-¿Qué 'aforo' tiene?

-Dispone de un salón principal con capacidad para cincuenta comensales, de un reservado para unas diez personas aproximadamente, y de una terraza cubierta en la que se puede dar cabida a treinta y cinco clientes más. En ésta última el ambiente es muy distendido e informal, y a nuestros asiduos les encanta reunirse en ella para tomar copas después de comer.

-El ambiente de Prado es minimalista, ¿sus platos también?

-Si bien es cierto que la decoración tiene detalles minimalistas, tengo que hacer especial hincapié en que su cocina no lo es, y en que sus platos se presentan en cantidades tradicionales.

-¿El alma de Prado son los fogones?

-Como no puede ser de otra manera.

-Su carta es muy sofisticada, sin embargo da la sensación de que lo que realmente ofrecen es una comida mediterránea muy elaborada. ¿Está de acuerdo conmigo?

-En efecto, nuestra oferta está basada en la cocina mediterránea, lo que nos diferencia del resto es la presentación y el tratamiento de los ingredientes.

-Tengo entendido que su cocina se fundamenta en la técnica de la alternancia de los puntos de cocción…

-Así es, sometemos los ingredientes a diferentes temperaturas y puntos de cocción, y puedo decir que los resultados son espectaculares en cuanto sabores y texturas.

-Hábleme de las especialidades de la casa…

-Pues son muchas, pero destacaría la receta del tocino crujiente con 'puntillas' por ejemplo, o la de la crema de garbanzos y col -cuya base es la berza clásica jerezana-; aunque no puedo dejar de nombrar las canes y los pescados, que se trabajan de una forma exquisita, así como la repostería, que es casera al cien por cien.

-¿La calidad está reñida con el importe?

-No tiene porqué, de hecho el restaurante Prado ha apostado por brindar la máxima calidad a unos precios bastante asequibles para cualquier bolsillo. Hay menús desde quince euros.

-Supongo que estará orgulloso de que su restaurante forme parte de la asociación 'Rutas del Vino y Brandy del Marco de Jerez', ¿les ha resultado fácil su incorporación?

-Quisiera en primer lugar agradecer a los responsables del área de Turismo del Ayuntamiento su magnífica colaboración con Prado en este aspecto, ya que ante todo nos ofrecieron una información sumamente detallada acerca del enoturismo y la comercialización de los productos de la zona. Nuestra incorporación como miembros de las 'Rutas del Vino' se traduce en la sensibilización y compromiso de nuestra empresa hacia el citado sector, hecho que por supuesto se ha plasmado en la ampliación de nuestra oferta vinícola.

-Dentro de pocas semanas celebrarán su primer aniversario, ¿balance positivo?

-Positivo. Aunque por supuesto somos conscientes de la situación económica global que actualmente atravesamos. Aún así, la acogida del público ha sido muy buena, ya contamos con una clientela muy fiel.