Parking Centro frena su caída en picado tras la apertura de Honda

Acaba de cumplirse un mes de la reapertura al tráfico de la calle Honda. El balance que hacen los comerciantes es positivo. Destacan que la calle "ahora tiene sentido porque antes no era ni una calle peatonal ni estaba abierta al tráfico. No era nada". Pese a todo, la mayor parte de los comerciantes consultados por este medio apuntan que aún es temprano para hablar de resultados ya que julio, por su condición de mes de veraniego, no da una idea que se pueda considerar ajustada a la realidad. "Habrá que esperar a septiembre", señalaron.

Quienes más se alegran de la reapertura son los trabajadores y responsables del Parking Centro, estacionamiento subterráneo de la compañía Interparkings, que ha visto cómo en apenas un mes "la caída libre a la que se había visto sometida la instalación por el cierre de la calle Honda al menos se ha frenado".

Fuentes de la compañía destacaron a este medio que "la reapertura al tráfico de la calle Honda se ha notado positivamente. También es cierto que la fecha no es la más idónea ya que en julio mucha gente está de vacaciones y no viene al centro. Los efectos de la reapertura se notarán en septiembre". Recordando el cierre de la calle, responsables de Interparkings apuntan que "aquello fue una debacle ya que, además, llegó la crisis económica. Por este último motivo mucha gente dejó de venir al centro. En lo que al número de usuarios se refiere la línea era descendente. Desde la reapertura, esa caída libre se ha parado, pero el número de clientes tampoco ha aumentado. Por ahora se mantiene la cifra, pero sin que haya una mejora. A partir de septiembre esperamos que vuelva a crecer el número de clientes".

Para la compañía Interparkings, una de las causas de la caída en el número de jerezanos que acudían al centro de la ciudad radicaba en que "quienes deseaban acercarse a esta zona de la ciudad desde las zonas Sur o Este debían llegar hasta la mismísima iglesia de Fátima. Era una absoluta locura. El jerezano de la zona norte es el único que no tiene problemas. Media ciudad padece de serias dificultades para llegar al centro urbano".

Donde igualmente se encuentran a la expectativa de que el próximo mes de septiembre dicte sentencia es en la propia calle Honda. Sus comerciantes consideran que ahora que la calle ha recuperado el tráfico por lo menos se gana lo que ellos denominan 'impacto publicitario', o lo que es lo mismo, que muchos jerezanos pasan con sus coches, ven las tiendas y posteriormente retornan con más tranquilidad para ojear y comprar.

Paloma, dependienta de la tienda 'Duba', asegura que ha llegado a atender a clientes que literalmente "se habían olvidado de la tienda a fuerza de no verla". La comerciante ruega que el tranvía jamás pase por Honda y considera que si la calle se hubiese peatonalizado en condiciones "habría sido otra cosa".

Por su parte, Koki Forno, propietario de la conocida tienda de artesanía 'Kontiki', destaca que "con la reapertura al tráfico hay un poco más de movimiento, al igual que de ruido y de polvo". En cuanto a lo realmente importante, el número de clientes, Forno apunta que "julio no es un mes como para hacer comparaciones pero vienen a ser los mismos que antes de la reapertura. Además, no pasa el mismo volumen de coches que antes. Esto se ha quedado en un 20 ó un 30%". En Etniart, otra tienda de artículos de artesanía, señalan que las ventas han crecido ligeramente este mes si bien lo que más destacan es que "la calle ya no está tan solitaria como antes".

Por su lado, Gema, la dependienta de la zapatería especializada MBT, dice que por el establecimiento pasa ahora más gente, aunque las ventas se mantienen en parámetros similares a cuando la calle estaba cerrada al tráfico. "Lo que creo muy importante es que el tráfico hace que la gente te vea, que sepa que estás ahí. Eso es un beneficio de cara al futuro".

Para terminar, Gracia Martínez, propietaria de la conocida mercería 'Doña Carmen', destaca que por la calle "ahora pasa más gente, lo que sucede es que estos no son días de mucho comercio por el calor que hace. Los coches animan la calle. La verdad es que no sé para qué tuvieron que cerrarla al tráfico. Yo todavía no lo entiendo".