Una empresa especializada contratada por el Ayuntamiento colocó ayer pivotes de acero en las aceras de la calle Clavel, a la altura del colegio La Salle Buen Pastor, para impedir que los coches puedan aparcar provisionalmente pisando en parte ambas aceras, algo que suele ser habitual en esa calle coincidiendo con la entrada y salida de clase de los alumnos de ese centro educativo. La medida, que no fue comunicada con antelación a los responsables del colegio, fue ayer muy comentada por padres y madres que tienen a sus hijos escolarizados en La Salle, en especial por cuantos usan el coche para llevar y recoger a sus hijos del colegio.

La calle Clavel suele registrar retenciones de tráfico tanto en el horario de entrada de los alumnos a La Salle como con ocasión de la salida del colegio, colas de vehículos que se prevén a partir de ahora mayores al no permitirse desde ayer los aparcamientos provisionales pisando la acera.