El Museo Arqueológico de Jerez celebró este martes la inauguración de las I Jornadas de Estudios Andalusíes del Centro de Estudios Históricos Jerezanos (CEHJ), dedicadas este año a celebrar el VIII centenario de la muerte del sabio jerezano Ibn ‘Abd al-Mu’min al-Sharishi, gramático y hombre de letras conocido por su magno comentario a las Maqamat del ulema oriental al-Hariri.

La apertura estuvo a cargo de la profesora de Investigación del CSIC Maribel Fierro Bello, con la conferencia inaugural 'La difusión de la ciencia y el saber bajo los almohades', en la que su autora mostró el contexto en el que se formó al-Šarīšī para entender mejor cuál fue su contribución al mismo.

La investigadora apuntó que durante el califato almohade (1130-1269) "tuvo lugar la actividad intelectual de destacados personajes como el místico y filósofo de Guadix Ibn Tufayl (m. 1185), autor de 'El filósofo autodidacto' - una obra de una asombrosa modernidad- y del filósofo y jurista cordobés Averroes (m. 1198), el gran comentador de Aristóteles, así como del personaje que nos ocupa en estas Jornadas, el jerezano Ibn ʽAbd al-Muʼmin al-Šarīšī (m. 1223), además de muchos otros".

Explicó que durante esa época "se formaron también el cordobés Maimónides (m. 1204), el gran renovador del judaísmo medieval, y el místico murciano Muḥyī l-dīn Ibn ʽArabī (m. 1240), sin cuya magna obra no se puede entender el desarrollo místico en el mundo islámico. Estos dos últimos abandonaron al-Andalus y se establecieron en las tierras centrales del mundo islámico. Esta emigración, junto con la persecución de la que fue objeto Averroes hacia el final de su vida, han llevado a veces a concluir que el califato almohade fue hostil a la actividad intelectual. Por el contrario, los califas almohades - al promover la creación de nuevas elites religiosas e intelectuales - pusieron en marcha un ambicioso programa educativo que promovió el didacticismo y el enciclopedismo y que fue visto como una oportunidad de renovación por quienes se sentían insatisfechos con lo heredado de épocas anteriores. Se produjo así uno de los periodos de mayor florecimiento intelectual en la historia de al-Andalus. Naturalmente, existieron tensiones e intentos por hacer fracasar las nuevas vías abiertas. Pero aun así fue mucho lo conseguido y tuvo perdurables efectos". 

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