Bodegas de Sanlúcar, asociación que ostenta la representación de la manzanilla con dos vocales en el pleno del Consejo Regulador, considera que el acuerdo adoptado en la última sesión plenaria es la ratificación de un “contrato de intercambio en el Marco entre Cooperativas y Fedejerez a costa de Sanlúcar”. Según la organización sectorial sanluqueña, con dicho intercambio, “las primeras intentan conseguir la zona de crianza, y la patronal jerezana, que en Sanlúcar, ciudad origen de todos los vinos de crianza biológica, no se pueda criar fino”.

Las firmas bodegueras sanluqeñas lamentan que para lograr su objetivo “han llegado incluso a afirmar que la Manzanilla y el Fino son el mismo vino”, lo que interpretan como “el mayor ataque que ha sufrido una Denominación de Origen de Andalucía, propiciado por intereses meramente comerciales”, como aseguran que demostrarán donde procede.

En un comunicado, Bodegas de Sanlúcar explica que “un día que podría haber sido histórico, en positivo, obliga a la mayoría de bodegas de Sanlúcar una vez más a defenderse”, por lo que anuncian que “se abre un largo proceso, en el que confiamos que haya altura de miras para seguir trabajando en acuerdos acerca de lo que de verdad importa en estos momentos, en el que algunas bodegas del sector luchan cada día por su supervivencia ante el escenario más duro que nos ha tocado vivir provocado por el coronavirus”.

Esta asociación bodeguera ya ha trasladado al Consejo Regulador que hará “todo lo posible” para separar las decisiones relacionadas con la DO Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda de las que atañen a la DO Jerez-Xérès-Sherry, al tiempo que anuncia “recursos administrativos en primera instancia, y agotaremos todas las vías a nuestro alcance en defensa de un sector estratégico de la ciudad de Sanlúcar de Barrameda”, para lo que está “valorando denunciar el acuerdo del pleno, entre otros, ante la Agencia de la Competencia y de la Regulación Económica de Andalucía”.