El empleo sube en el último mes y en el último año en Jerez, pero modera su crecimiento. El número de trabajadores afiliados a la Seguridad Social en el municipio jerezano al cierre de octubre ascendió a 64.724 personas, cerca de 300 más que en septiembre –en concreto en 297 y el +0,46% en términos relativos–.

Es el menor aumento en el último trienio de este mes, que el año pasado registró un repunte de 1.451 afiliados (+2,36%), mientras que en 2020, en plena pandemia, se recuperaron casi un millar (+1.59%) por las mismas fechas.

Curiosamente, el año del estallido del covid se invirtió la tendencia de este mes, que en los años previos se caracterizaba por sus caídas.

La comparativa interanual refleja igualmente la desaceleración del crecimiento, toda vez que los 1.869 afiliados de más acumulados en los últimos doce meses (+2.97%) distan mucho de los algo más de 3.000 que había en septiembre (+4,91%) , cifra sobre la que se ha mantenido la ciudad durante el presente ejercicio salvo en julio, que rezaba hasta ahora como la mínima diferencia interanual con 2.734 afiliados más que un año antes (+4.40%).

Pese a la ralentización, Jerez encadena dos meses consecutivos de subida de la afiliación de trabajadores tras la fuerte caída de agosto, cuando se perdieron 1.333 cotizantes de los que se han recuperado ya 1.256 gracias al impulso de septiembre y octubre. El dato de 64.724 afiliados de este último mes es el tercero mejor del año tras los 64.792 de julio y los 65.342 de abril, el techo del año en curso en el que el municipio se acerca a las cifras de afiliación de 2008, en el inicio de la crisis financiera.

Catorce años y tres crisis después, la financiera, la sanitaria y la actual crisis inflacionista derivada de la guerra de Ucrania, Jerez vuelve al punto de partida, aunque lejos de la barrera de 71.000 afiliados que se superaron con creces en la cima de la burbuja inmobiliaria, allá por mediados de 2007.

La cifra de afiliados alcanza las 64.724 personas, el máximo de octubre desde 2008

La pandemia, precisamente, frenó en seco la recuperación iniciada a partir de 2013, cuando se tocó el suelo de afiliación en la ciudad con poco más de 52.100 trabajadores con alta en la Seguridad Social, del orden de 12.600 menos que los registrados al cierre de octubre de este año pese a la inflación desbocada.

El cese de toda actividad no esencial en marzo de 2020 se llevó por delante de febrero a marzo más de 6.000 afiliados, desde los 62.700 que se superaron en el primero de estos meses a los 56.600 registrados en el segundo. En octubre de aquel año, aún en la fase aguda de la crisis sanitaria y con muchas de las restricciones para la prevención del covid en vigor, la afiliación logró superar las 61.500 personas, unas cinco mil más que en el inicio del confinamiento de la población y apenas 500 menos que los alcanzados en octubre del año anterior, en prepandemia.

En lo que va de año, el número de afiliados ha aumentado en cerca de tres mil (2.956 y el 4,78%), subida motivada, principalmente, por el fin de las restricciones con la nueva normalidad. Pero una vez recuperado el terreno perdido por el impacto de las crisis, el crecimiento puramente dicho a partir de ahora se hace más cuesta arriba, de ahí la desaceleración que empieza a aflorar en las estadísticas del Ministerio de Seguridad Social.

De momento, y a la espera de la previsible disminución de los márgenes de subida, el promedio de afiliación de enero a octubre del año en curso asciende a 63.880 trabajadores frente a los 61.013 con los que cerró el ejercicio de 2021, lo que se traduce en un repunte medio del 5%. El dato actual también supera al de 2019, que se saldó con 61.579 afiliados de media al mes.

En 2008, a cuyos niveles se aproximan los datos de afiliación de los últimos meses en Jerez, la afiliación media mensual superó los 67.100 trabajadores, unos 3.200 más que los actuales, lo que en términos relativos se traduce en una diferencia de en torno al 5%.