La crisis se lleva por delante a 200 transportistas en lo que va de año

Antonio Gutiérrez, secretario general de la Asociación Provincial del Transporte, ha asegurado que en lo que va de año el sector del transporte ha perdido más de 200 pequeñas empresas en la comarca de Jerez. Según apunta, "se trata de datos extraoficiales pues se trata de empresas que aunque siguen teniendo licencias en vigor (las conocidas autorizaciones administrativas) han dejado la actividad de facto ya que estos permisos tienen una vigencia bienal. Es por ello que el verdadero impacto, que ya se nota, será verdaderamente detectable el año próximo".

La primera consecuencia ha sido que "encontrar camiones pesados en la comarca se ha tornado una labor nada fácil", apunta Gutiérrez, quien añade que el primer efecto de la referida retirada del sector de dos centenares de empresas se ha detectado en que "han cursado baja en la Asociación provincial", organismo gremial que gestiona los problemas que las empresas pueden tener en el ejercicio de su labor profesional, tales como sanciones y gestión de documentación, entre otros. Otra baja cursada por las empresas ha sido la cumplimentada ante los servicios de la Hacienda Pública. Según Gutiérrez, el negocio tiene múltiples particularidades entre las que destaca, por ejemplo, "que un camión cuesta mucho dinero, no sólo al comprarlo, sino para moverlo por el precio del combustible y también por el simple hecho de poseerlo, que provoca que el profesional siga desembolsando más dinero". Las 200 empresas de transporte que han causado baja en lo que va de año "se ubican en la comarca de Jerez, en un radio de 60 kilómetros cuyo epicentro es esta ciudad".

Los graves problemas económicos que afectan al país, así como los impagos a los que se ven sometidas las empresas (especialmente los autónomos, característica de la mayor parte de los transportistas que utilizan para su trabajo vehículos de mediano o pequeño tamaño) han condenado a las referidas empresas a darse de baja. "Hay quienes se están aprovechando de estos tiempos tan malos -apunta el secretario general de la Asociación Provincial del Transporte- para no pagar, haciendo de este comportamiento una norma. Se ven, en cierto aspecto, amparados por el comportamiento de la Administración que es la primera en no abonar los servicios que requirió en su momento". La ley obliga a pagar este tipo de servicios en un mes, pero la consigna legal no es debidamente cumplida.

El año 2011 comenzó, según Gutiérrez, con un millar de empresas en el sector "si bien en la actualidad apenas son unas 800". Todas ellas, las que quedan, gestionan más de 2.000 vehículos industriales". El hecho ya reseñado de que tener un camión cueste dinero -aunque de hecho esté parado- está provocando que "quien más y quien menos se esté quitando los camiones de encima vendiéndolos para dedicarse a otros menesteres".

A todos estos problemas se une según los expertos del sector el hecho de que las circunstancias no acompañen, tanto las referentes a la coyuntura económica como al panorama sancionador, ya que las multas son tradicionalmente uno de los principales lastres que debe soportar este sector. El precio de los combustibles sigue siendo una de las mayores cargas que deben soportar las compañías de transportes, así como los bajos precios (que apenas ayudan a obtener un beneficio mínimo) y los referidos problemas a la hora de cobrar los servicios prestados.