Unos 500 cuadros de luz se quedan sin control por la huelga de UTE Jerez

Sin material y sin dinero. Los trabajadores de la concesionaria UTE Jerez, empresa que gestiona el mantenimiento del alumbrado público, iniciaron ayer una huelga indefinida por el impago de cinco nóminas. A primera hora, los empleados se concentraron en la empresa y ante "la falta de noticias" con la concesionaria y el Ayuntamiento, la plantilla decidió realizar una protesta con los coches de servicios en el centro. "Aquí nadie nos dice nada, todo sigue igual", lamentó el presidente del colectivo, Miguel Jiménez, quien añadió que "saldremos con los coches y al menos nos tendrán que ver y oír".

Los trabajadores criticaron que lejos ha quedado el compromiso de recibir sus nóminas, como se les comunicó el pasado viernes. "Sí, nos dijeron que a lo largo del viernes íbamos a cobrar. Nosotros aseguramos que si era así, desconvocábamos todo del tirón. Pero el dinero aún no ha llegado", declaró Jiménez. La plantilla reconoció que "nos hemos visto obligados a llegar a la huelga ante la dejación del pago de las nóminas y porque la situación en la que nos encontramos ya no se puede aguantar". De esta forma, los empleados reiteraron que "hasta que no cobremos, no volvemos a nuestros puestos".

Estos paros dejarán sin control los 500 cuadros eléctricos de los que dependen los 27.000 puntos de luz, provocando que la "inseguridad aumente. A día de hoy hay más de 60 calles sin suministro. Aunque la gente no lo crea, hay averías a diario, y a medida que no se vayan arreglando se verán las consecuencias". Pero hay más. En la cuenta atrás para el inicio de la Semana Santa, la plantilla de esta UTE recordó que días previos al Domingo de Ramos deberían realizarse trabajos como la reubicación de faroles y elevación de cables por las calles donde pasan las hermandades. De continuar la huelga, estas labores se quedarán sin hacer, provocando más de un problema en la Semana de Pasión.

Por su parte, el primer teniente de Alcaldía del Ayuntamiento, Antonio Saldaña, aseguró que se están "haciendo gestiones" para tratar de solventar el conflicto, aunque reconoció que el Consistorio no ha podido cumplir con el calendario de pagos acordado con la concesionaria para liquidar la deuda, que asciende a 987.000 euros. "Se hacen unas previsiones pero la realidad tuerce, a veces, esa realidad por los problemas de tesorería que tiene el Ayuntamiento desde hace tiempo", dijo. Saldaña comentó, además, que se está buscando una salida de urgencia para que, al menos, se puedan retomar los trabajos de reposición antes de que comience la Semana Santa. Al respecto, apuntó: "Llegan unas fiestas en las que la ciudad tiene que tener alumbrado por motivos de seguridad".

Asimismo, el portavoz reiteró que, al igual que se está haciendo con el resto de concesionarias, se están buscando empresas que tengan capacidad para "absorber financieramente esa diferencia de pagos por parte del Ayuntamiento". Asimismo, recordó que el contrato con UTE Jerez ya está acabado, aunque se amplió mientras se hacía una nueva adjudicación. "Es una decisión de la empresa ser cauta económicamente para destinar el dinero a cubrir el servicio; esto no nos agrada, pero las relaciones son buenas ya que se está intentando resolver la situación", agregó el popular.