El jerezano Dani Llamas presentará este sábado 20 de mayo en el Teatro Villamarta 'A fuego', su último trabajo discográfico en el que mezcla el flamenco con el pop y el rock y que constituye la base de su gira nacional, iniciada el septiembre del pasado año con su puesta de largo en la Bienal de Flamenco de Sevilla.

Tras su paso por la importante cita sevillana, Nocturama y diversos conciertos por otros escenarios de nuestro país, el artista, nacido en el barrio de Santiago, hace escala en su ciudad natal con su banda para compartir este disco que viene a ser la consolidación de un estilo, después del giro hacia el flamenco que dio su carrera en solitario tras la publicación de su anterior trabajo que lleva por título La verdad.

En 'A fuego' Dani Llamas vuelve a zarandear el árbol de las raíces andaluzas con 12 temas en los que se alternan palos flamencos como rondeñas, polos, bamberas, soleá, tarantos, tangos, bulerías, sevillanas, marianas y seguiriyas, pasados por el tamiz de la música de raíz estadounidense. Aparecen, por tanto, el universo pop y rock de guitarras eléctricas, así como el misticismo del folk.

No se trata, pues, de un disco flamenco al uso, sino “la prueba de que nuestro folklore está vivo y sirve de materia prima para hacer nuevas canciones y letras”, según el artista. Y es que no es la primera vez que este músico polivalente se atreve con las mezclas de estilos, puesto que ya lo hizo con evidente éxito en su penúltimo disco que se convirtió, por méritos propios, en una de las sorpresas discográficas de 2020 al ser elegido como uno de los mejores álbumes en ese año.

'A fuego' es, por tanto, “un paso más allá” en este proceso de cambio en sus parámetros artísticos, donde muestra con creces que el flamenco y sus distintos pales son “una fuente interminable de inspiración para hacer canciones de pop y rock”.

Desde que con 18 años formara un grupo de punk llamado GAS Drummers y a los 21 ya había girado por Estados Unidos, Canadá y Europa, en 2018 el artista jerezano firmó con el sello estadounidense One Week Record y puso rumbo a Los Ángeles para grabar un disco con el músico y productor Joey Cape. Ahora ha comenzado su camino de vuelta, donde se refugió en la escucha compulsiva de figuras como Pastora Pavón y Agujetas.