Bioalimentación Infantil de Andalucía, S.L., más conocida por su marca comercial 'Bia', es una empresa con sede en el parque tecnológico agroalimentario (PTA de Jerez) dedicada a la elaboración de potitos ecológicos. Constituida en 2009, la sociedad inició su actividad comercial entre finales de 2012 y principios de 2013 con el lanzamiento de los primeros potitos tras una inversión de 1,8 millones de euros.

Poco más de dos años después de la salida al mercado de sus productos, el Boletín Oficial del Estado (BOE) se hacía eco en su edición de ayer del edicto del juzgado de lo Mercantil número 1 de Cádiz en el que se anuncia que, por auto de 19 de febrero de 2015, la declaración del concurso voluntario de acreedores de esta empresa por su situación de insolvencia.

La firma radicada en Jerez captó importantes ayudas públicas para el desarrollo de su proyecto. En concreto, Bioalimentación Infantil de Andalucía se benefició en 2009 y 2010 de dos préstamos por importe de 235.092 y 475.810 euros de los planes de reindustrialización del Gobierno central para el desarrollo de las líneas de potitos ecológicos. La empresa recibió igualmente un incentivo de algo más de 558.000 euros aprobado por la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (Idea) en 2010 para la puesta en marcha de su planta en el PTA.

En total, cerca de 1,2 millones de euros para una inversión total de 1,8 millones que llevaba aparejada inicialmente la creación de una veintena de puestos trabajo y cuyo objetivo era satisfacer la demanda creciente de potitos infantiles ecológicos y contribuir a la valorización de hortalizas y frutas ecológicas andaluzas, en general, y de la provincia, en particular, mediante la transformación de estas materias primas en un producto elaborado con el consiguiente valor añadido.

La empresa elevó su capital social mediante ampliación el pasado mes de agosto hasta los 370.706 euros y cuenta con tres incidencias con las administraciones públicas: un apremio de ejecución del Ayuntamiento y dos embargos del Servicio Provincial de Recaudación y Gestión Tributaria de la Diputación.

Los acreedores de la concursada, de la que no se ofrecen detalles de la deuda que acumula, deberán comunicar sus créditos a Isabel Nevado del Campo, administradora concursal designada, en el plazo de un mes a contar desde la publicación en el BOE, en el que se detalla que el deudor conserva las facultades de administración y de disposición de su patrimonio, aunque sometidas a la administración concursal.

Bioalimentación Infantil de Andalucía tiene por administrador único a José María Penco, empresario de origen cordobés que también figura al frente de la Compañía General de Vinos de Cádiz, que a finales de 2008 adquirió la bodega Regantío Viejo, acogida a la indicación geográfica de los vinos de la 'Tierra de Cádiz'. Esta empresa con sede en Zahara, y que según fuentes del sector también atraviesa por dificultades en los últimos tiempos, también explota un proyecto enoturístico (alojamiento y restauración).

De hecho, la Compañía General de Vinos de Cádiz tiene asociadas ocho incidencias entre los años 2011 y 2013 con las administraciones públicas, siete de ellas con Hacienda, aunque en fases previas a la ejecución.

José María Penco es el administrador único de otras tres sociedades mercantiles, en este caso radicadas en Córdoba, y a las que no les consta incidencia alguna hasta la fecha. Dos de estas empresas son ingenierías vinculadas al sector inmobiliario, mientras que la tercera tiene por objeto social los servicios técnicos de ingeniera agroindustrial, así como el comercio de aceite y aves que también cría.