"La fiesta de las motos es un evento tranquilo y seguro"

Normalidad y ausencia de incidentes es lo que repiten desde el domingo los responsables de las distintas administraciones implicadas en el control y vigilancia del Gran Premio de Motociclismo. Y ayer lo volvieron a hacer tanto la Subdelegación del Gobierno como la Junta de Andalucía. Para empezar, se incidió en que hubo un incremento en el número de asistentes al evento. Las cifras oficiales de espectadores en el circuito fueron de 117.001 en la jornada del domingo, 70.000 el sábado y 40.000 el viernes. Por ende, este aumento con respecto al año pasado se notó en el tráfico en torno al circuito donde los 250.000 movimientos de vehículos que barajó la Dirección General de Tráfico (DGT) se superaron en unos 10.000, un 5,09% más que en la edición de 2013. Este incremento se achaca al buen tiempo y la coincidencia del puente festivo con la prueba deportiva.

La única nota negativa fue el accidente mortal de un motorista ocurrido en la mañana del domingo en el término municipal de Dos Hermanas que la estadística oficial ha incluido dentro de los movimientos generados por la prueba motociclista jerezana. El suceso se produjo en el kilómetro 562 de la N-IV interrumpiéndose así dos años sin muertos en las carreteras por los desplazamientos generados por la prueba.

Durante todo el fin de semana, tanto la DGT como la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil pusieron especial atención en controlar los excesos de velocidad y la conducción bajo los efectos del alcohol o de las drogas. En este sentido, tres helicópteros de tráfico sobrevolaron las carreteras de la provincia durante estos cuatro días, entre ellos uno dotado con el sistema 'Pegasus' de control de velocidad desde el aire que hizo seguimiento a unos 3.000 vehículos registrando 78 denuncias. Uno de ellos fue al conductor de una motocicleta que iba a 220 kilómetros por hora por una carretera convencional doblando así los límites de velocidad.

La Subdelegación del Gobierno no aportó datos ayer sobre el número de infracciones detectadas por los radares fijos y móviles -aunque se apunta que la velocidad media de circulación de las motocicletas, que se registra en un punto determinado de la A-4, se mantuvieron en "cifras similares" a las del año pasado- ni tampoco de las denuncias tramitadas por conducir bajo los efectos del alcohol. Sí se informó oficialmente que en esta edición no se ha observado un número significativo de motocicletas con la placa de matrícula oculta para evitar ser identificados.

Uno de los momentos durante el fin de semana desde el punto de vista del tráfico es la evacuación del circuito una vez culminada la competición. Así, según los datos aportados por la representación del gobierno estatal en la provincia, se levantó el dispositivo dos horas y 34 minutos después de la finalización de la prueba, unos siete minutos más tarde que en 2013. Desde la Subdelegación se achacó este ligero aumento del tiempo a la existencia de una mayor afluencia de público durante el Gran Premio -las cifras oficiales de asistencia fue de 107.000 espectadores en la jornada del domingo- y a la coincidencia de la salida de los moteros con el regreso de los que decidieron pasar el puente festivo en las localidades costeras de la provincia, aunque el aumento no se consideró reseñable. Mientras, en la tarde del domingo se registraron retenciones de más de 10 kilómetros en la autopista (AP-4) "por la propia demora de los motoristas al pagar el peaje (como quitar guantes, etc)".

Las autoridades también destacaron la ausencia de incidentes reseñables en el apartado de seguridad ciudadana y de "quejas vecinales". Las estadísticas reflejan que durante el fin de semana la Policía Nacional detuvo a siete personas; cinco de ellos se hicieron en Jerez por reyertas con lesiones (dos), robos con violencia (dos) y por provocar un accidente de tráfico al estar ebrio (uno); mientras, hubo dos en El Puerto por un robo con fuerza en el interior de una vivienda próxima a la Ribera. A esto se une que los agentes policiales jerezanos llevaron a cabo tres servicios humanitarios.

Por otro lado, en el entorno del circuito, la Guardia Civil volvió a tener operativa una oficina de recepción de denuncias para atender las incidencias. La Subdelegación del Gobierno explicó que se registraron 12 denuncias por delitos penales (no se especificaron) que conllevaron un total de tres detenciones y 162 actuaciones por infracciones administrativas tales como la acampada en zonas prohibidas. Para el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, todos estos datos corroboran que "la fiesta de las motos es un evento tranquilo en el que, pese al alto número de participantes, la gente acude a disfrutar en un ambiente de seguridad".

Mientras, en el apartado sanitario, el centro coordinador de urgencias y emergencias del 061 de la Junta atendió 21 situaciones de atención por accidentes de tráfico durante el Gran Premio. No obstante, no se detectó una subida en el número de intervenciones con respecto a anteriores fines de semana.

Finalmente,el organismo autonómico mantuvo un equipo de emergencias en el exterior del circuito que atendió a 372 personas, todas ellas de carácter leve y sin que necesitaran de traslado al hospital. La mayoría de los casos fue por quemaduras, picaduras, cefaleas, mareos, vértigos y reacciones alérgicas, entre otros.