Una sábana y una leyenda escrita con spray negro con varios corazones: "Roma no se hizo en un día". Esta ha sido la respuesta que ha dado el empresario Gonzalo Assiego para responder a las dudas que existen sobre la adaptación de este emblemático edificio como restaurante y bar de copas.

Las obras se iniciaron en octubre del año pasado pero desde que comenzó la pandemia apenas han avanzado, lo que, unido al silencio del empresario afincado en Bali, han alimentado la preocupación sobre el proyecto, uno de los muchos que anunció en la ciudad Assiego.

A raíz de la publicación por parte de este Diario del estado de esos proyectos en Jerez, Assiego emitió una nota en la que aseguraba que seguirá con el Gallo Azul y que abrirá "a comienzos del año 2021". La pancarta casera colgada de la fachada, junto a una de las ventanas, parece una clara respuesta a esas dudas generadas por la falta de información sobre sus proyectos. 

Fuentes próximas al empresario señalaron días atrás que el retraso se debe a la falta de un material de importación para acabar la reforma, como la solería y un ascensor que se considera vital para la puesta en marcha de un edificio cuya apertura ya tendría que haberse realizado a tenor de la licencia de obra concedida.

En la misma fachada del edificio en la que está la pancarta se puede ver un cartel de la Gerencia Municipal de Urbanismo en la que se puede leer que el comienzo de las obras es el 22 de agosto de 2019 y la fecha de finalización de las mismas el 23 de marzo de 2020.

Al comienzo de la pandemia, el empresario ya anunció que sus proyectos se verían ralentizados y, de hecho, desde entonces no se han visto trabajos en el edificio.