El gobierno rechaza la carta de garantía para la plantilla municipal

Los grupos de la oposición pidieron ayer que, por urgencia, se incluyese en el orden del día la propuesta realizada por parte de la Agrupación de Técnicos Municipales (ATMJ) para que se apruebe una carta de garantías para los trabajadores ante la integración en el Ayuntamiento de las plantillas de las empresas municipales. A pesar de que la urgencia contó con el apoyo de toda la oposición, el PP frenó la iniciativa. La alcaldesa, María José García-Pelayo, justificó esta decisión para dejar "campo libre a la negociación" que están llevando a cabo los trabajadores de empresas municipales. Además, señaló que son los afectados los que deben decir qué garantías deben plantearse. Tras conocer la noticia, desde la ATMJ señalaron que "creemos que en estos momentos lo que más nos preocupa a todos los empleados públicos municipales, es la estabilidad en sus puestos de trabajo. Esta estabilidad podía ponerse en grave riesgo con el aumento progresivo de la plantilla sin garantías, tanto por la nueva estructuración de las empresas municipales y su integración de algunas de ellas dentro del ayuntamiento y por otro lado por el aumento progresivo de la plantilla del grupo municipal con más de 500 trabajadores". Precisamente para "evitarlo", la ATMJ redactó la carta de garantías que, finalmente, ayer no se debatió en pleno. "La intención de la ATMJ era que, por unanimidad de todo el grupo municipal con representación en el pleno, apoyarán una carta de garantía de estabilidad de los trabajadores que nos ofreciera cierta sensación de seguridad a los empleados públicos en el futuro. ¡No ha sido posible!", lamentaron. En concreto, dicho documento pide para los empleados del Ayuntamiento y los que se integren en el mismo lo siguiente:

1) La aplicación al personal que se integra en el Ayuntamiento, de lo establecido en el artículo 44 del Texto Refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores, en cuanto al principio de sucesión de empresa.

2) La garantía de estabilidad laboral, para todos y cada unos de los empleados del Ayuntamiento y de las empresas municipales que se integren, tanto actualmente, como en la próxima legislatura.

3) El aumento de la plantilla del Ayuntamiento y lo que ello suponga, no podrá, bajo ningún concepto, ser utilizado como motivación ni económica ni organizativa para futuras medidas que limiten o reduzcan las actuales condiciones laborales de todos los empleados municipales.