Guía práctica para mitigar los efectos del calor en el trabajo

Jerez se prepara para otra jornada sofocante este miércoles 19 de julio, en el que los termómetros volverán a acercarse a los 40 grados, como ya ha ocurrido durante buena parte del verano, que arrancó a finales de junio con una ola de calor en la que se alcanzaron los 41,6 grados en la ciudad.

El Plan Especial de actuaciones preventivas sitúa en 38,5 grados el umbral de temperatura a partir del que hay riesgo para la salud en la provincia de Cádiz, situación frente a la que es fundamental adoptar medidas que mitiguen sus efectos.

No en vano, en 2022 se registraron cerca de cinco mil muertes en España por causas relacionadas con el calor, entre ellas accidentes laborales, cuyo riesgo aumenta hasta un 10% con el aumento de las temperaturas según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Además, se estima que los empleados pierden hasta la mitad de su productividad cuando desempeñan su labor por encima de 33 o 34 grados, motivo por el líder mundial de soluciones para el entorno de trabajo Lyreco lanza una serie de recomendaciones prácticas que permitan prevenir y sobrellevar el calor extremo en los meses de verano.

Guía práctica para hacer frente a las altas temperaturas en el trabajo

El denominado ‘estrés térmico’ -niveles de calor en el cuerpo superiores a lo que puede tolerar- puede conducir a la hipertermia y en los casos más severos, a la muerte. Por eso, Intersafe, la unidad especializada en seguridad laboral de Lyreco, elabora una guía de recomendaciones prácticas para sobrellevar de la mejor manera posible las altas temperaturas en el lugar de trabajo:

• Mantener una hidratación adecuada: beber agua regularmente, antes de tener sed (es una señal que avisa de la necesidad de ingerir líquido, por lo que es recomendable adelantarse a este aviso del cuerpo) entre dos y tres litros de líquido diarios, evitando las bebidas azucaradas e incorporando alimentos que poseen agua naturalmente, como la fruta.

• Vestir ropa ligera y transpirable: elegir prendas de colores claros, tonos cálidos y vívidos, ya que reflejan la luz y no atraen tanto el color. En cuanto a tejidos, hay que descartar las fibras sintéticas como el poliéster, nailon, acrílicos, polipiel, entre otros por ser pesados y poco transpirables. Por el contrario, es recomendable vestir de algodón (cómodo, transpirable, ligero); de seda (con la desventaja de que puede causar cercos de sudor, pero es muy absorbente y seca rápido); lino (transpirable y fresco); o de tencel (fibra sintética que se obtiene de diferentes plantas, entre ellas el eucalipto). Todos estos tejidos facilitan la evaporación del sudor.

• Protegerse del sol: utilizar protector solar y renovar la aplicación al menos cada dos horas. En caso de que el desempeño de la jornada laboral se produzca en el exterior, es aconsejable cubrirse bien la cabeza con una gorra, sombrero o pañuelo y protegerse los ojos de la luz solar mediante el uso de gafas de sol.

• Si se trata de un trabajo físico, como labores agrícolas, sector de la construcción o similar, planificar la tarea en función de las temperaturas evitando realizar las más intensas en las horas centrales del día (entre las 12 :00 y las 16:00 horas).

• Realizar pausas con mayor frecuencia, aprovechando los momentos de descanso para refrescarse, beber líquido y recuperar energía. En el caso de que el trabajo se produzca en el exterior, se recomienda habilitar zonas de descanso con sombra.

En palabras de Ramón Abella, director de Intersafe Iberia, "como compañía comprometida con la seguridad y salud de los empleados, creemos útil la elaboración de una guía de consejos prácticos como ésta, en la que colaborar y apoyar a los trabajadores para aliviar en la medida de lo posible, las consecuencias perjudiciales de trabajar sometidos a estas altas temperaturas”.