Las medidas que adoptó el año pasado el Ayuntamiento provocadas por la pandemia del coronavirus le supusieron un gasto extraordinario de unos 3,2 millones de euros y que dejara de percibir unos 6,6 millones que tenía previsto en sus presupuestos. 

Teniendo en cuenta estas cifras, el gobierno sostiene que en 2020 el impacto económico que la crisis sanitaria tuvo el pasado año en las cuentas municipales fue de casi 10 millones de euros, según los datos apuntados este viernes por la delegada de Economía, Laura Álvarez. En el cálculo está incluida la repercusión tanto al Ayuntamiento como al resto de las entidades públicas municipales (empresas y fundaciones).

En cuanto a los gastos, la edil mencionó que la pandemia ha provocado que a lo largo de 2020 se incrementarán en 1,2 millones de euros la partida destinada a ayudas sociales y en unos 311.000 euros el coste del servicio de ayuda a domicilio. En este paquete de gastos provocados por la covid-19, la edil incluyó el dinero destinado a los convenios que recientemente firmó con las asociaciones de comerciantes, hosteleras, culturales y del taxi para ejecutar medidas de apoyo a estos sectores y que tiene un importe total de 400.000 euros. O los 213.000 euros que costaron al inicio de curso las labores de desinfección de los colegios.

Álvarez también mencionó los 200.000 euros que se han transferido a la empresa municipal de vivienda, Emuvijesa, para atender el impago de los alquileres, que se incrementó durante el año pasado debido a la crisis económica provocada por la covid-19. Precisamente, estos impagos le han supuesto a la empresa municipal una pérdida de 300.000 euros en ingresos.

En cuanto a las entradas de dinero de la caja, el gobierno incluyó en su cuenta los 1,3 millones cobrados de menos por la falta de actividad en el Circuito de Velocidad, el millón de euros por la caída de la venta de billetes del autobús urbano o los 723.000 euros ingresados por las calas realizadas en la vía pública. Es más, el Ayuntamiento dejó de percibir 1,3 millones por las bonificaciones de la tasa de veladores y terrazas, el Zoobotánico dejó de ingresar unos 370.000 euros, las instalaciones deportivas, unos 70.000 euros, y el Alcázar perdió unos 170.000 euros por la falta de turistas.

Como era de esperar, el impacto de la pandemia en las finanzas municipales ha sido superior al comunicado meses atrás por el Ayuntamiento a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) y que aparecían en sus informes sobre la situación económico-financiera del Ayuntamiento. En ellos, la autoridad fiscal situó la incidencia del coronavirus en torno a los seis millones, aunque en el momento de la comunicación no había acabado el año.

Eso sí, la delegada advirtió en su comparecencia de que este impacto en cuanto a los gastos puede ser superior ya que un Real Decreto aprobado al inicio de la pandemia por el Gobierno central para adoptar medidas de apoyo a los sectores económicos permite la posibilidad a las empresas que tienen concesiones públicas puedan exigir el reequilibrio de sus contratos debido a la incidencia del coronavirus. El Real Decreto permite compensar a estas empresas ya sea ampliándoles el plazo de concesión u otras medidas que se concreten. Por el momento, no se ha realizado una estimación del impacto en los contratos, aunque la delegada adelantó que se ha aceptado compensar a 11 de las 15 empresas que pueden acogerse a esta medida.

Por otro lado, la responsable de las finanzas municipales aprovechó la comparecencia para exigirle a la Junta que realice más transferencias a los ayuntamientos para atender los gastos ocasionados por la pandemia. Así, tras calificar de insuficiente los algo más de 734.000 euros transferidos el pasado año, volvió a cargar contra el organismo autonómico reprochándole que haya cerrado el pasado ejercicio con un superávit presupuestario de 850 millones.