Otra jornada con múltiples incidencias

El temporal, que ya se espera que remita hoy, dejó ayer otra jornada de múltiples incidencias en la provincia con imágenes parecidas a las del jueves. Cádiz y El Puerto fueron las ciudades con más salidas de los bomberos, que también intervinieron en otras localidades.

En El Puerto, varias zonas se recuperaban ayer de una fuerte tromba de viento que entró de madrugada por las playas de la Costa Oeste. Según ha podido saber este diario, la tromba entró por la playa de Las Redes y siguió una trayectoria paralela a la costa por varias urbanizaciones, para avanzar después tierra adentro hasta Perpetuo Socorro y Molino Platero, y girar desde allí hacia la zona del recinto ferial de Las Banderas. Muchos ciudadanos se despertaron alarmados por el ruido de la lluvia, y los destrozos que provocó el viento, que calificaron de tornado, aunque a la Policía Local portuense no le consta que se haya producido un fenómeno que pueda ser llamado de esa forma.

El caso es que la tromba de viento produjo la caída de árboles, carteles, vallas y setos en numerosos chalés y casas de campo. De esta forma, se produjo la caída de un árbol en la residencia de mayores de 'Las Banderas', en el colegio José Luis Poullet, en la gasolinera de la carretera de Sanlúcar, en el recinto ferial, donde algunos ejemplares se desplomaron sobre el tendido eléctrico, o en la zona de Perpetuo Socorro y Camino Viejo de Rota, además de en diferentes propiedades a lo largo de la carretera de Fuentebravía, como la finca 'Los Pinos'. Algunos ciudadanos afectados, expresaron sus quejas porque la concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento no se personó en sus propiedades cuando requirieron su presencia, ya cuando amaneció, para que autorizaran las podas de urgencia, ya que algunos árboles se habían desplomado sobre aceras y calzadas de uso público. También se desplomó una de las vallas perimetrales del paseo de La Victoria y una farola en la calle Mar Báltico.

En Puerto Real, más destrozos en las barriadas rurales. A las inundaciones en el Meadero de la Reina, que han continuado, se le suman las de El Marquesado y el Barrio Jarana. Vecinos incomunicados, calles totalmente anegadas y la destrucción de la pasarela peatonal del sendero del Marquesado fue la imagen con la que amanecieron ayer los vecinos. La situación era tan complicada que desde la asociación de vecinos han pedido que se declare al barrio como "zona catastrófica".

Mas de 170 litros por metro cuadrado en solo dos días han dejado verdaderos ríos por las calles de la populosa barriada, la mayoría de ellas sin asfaltar, generando importantes socavones en los que ya se han producido accidentes. Según relataban los propios vecinos, en la mañana de ayer, tuvieron que rescatar a una mujer y sus dos hijos, cuyo vehículo quedo atrapado en un socavón de la calle Jilguero. Uno de los puntos conflictivos del barrio es la calle Águila, conocida como "junta de los términos", donde el agua superó el metro de altura. En el caño Zurraque la fuerza de la crecida arrancó de cuajo la pasarela que lo cruza, único acceso peatonal en la zona.

Por otro lado, los bomberos de Tres Caminos también actuaron la madrugada de ayer en el Barrio Jarana. Las viviendas de los alrededores del Campo de golf Villanueva quedaron inundadas por la tromba de agua, principalmente en sótanos y garajes. Hasta en cinco ocasione tuvieron que intervenir los bomberos para achicar agua en calles como Portus Gaditanus.

En Sanlúcar, el Ayuntamiento y la empresa concesionaria Aqualia comenzaron ayer a reparar la tubería de alcantarillado que cruza la playa de Bajo de Guía, después de que el pasado jueves por la noche sufriera una rotura por el temporal "debido a la pérdida de arena". Las fuertes lluvias volvieron a provocar ayer numerosas inundaciones en vías públicas y viviendas, así como caídas de árboles. Entre las tres y las cuatro de la madrugada se registraron unos 80 litros por metro cuadrado y hacia las diez y media de la mañana, otros 15 litros en apenas un cuarto de hora.

El temporal también ha provocado diversos desperfectos en algunas calles, sótanos y garajes de la localidad de Bornos y el desprendimiento de piedras en la fachada del patio de la basílica menor de Santa María, en Arcos. El barro que arrastró el agua, en Bornos, originó el corte al tráfico de la carretera A-382, a primera hora de la mañana, aunque se restableció momentos después. En Arcos, una zona de la basílica de Santa María ha sido acordonada por si hubiera nuevos desprendimientos. El próximo lunes se iniciarán los trabajos de reparación.

En Chiclana apenas tuvo repercusión en comparación con la jornada del pasado jueves en la que hubo más de 40 intervenciones de los bomberos. No obstante, además hubo un corte parcial del suministro eléctrico en la madrugada de ayer por la caída de un rayo. Asimismo, sobre la una de la tarde se produjo un chaparrón con granizos que provocó algunos problemas de anegaciones en viviendas, garajes y caminos del extrarradio.

INFORMACIÓN ELABORADA POR C.BENJUMEDA, C.PERDIGONES, F.J.FRANCO, E. ARMARIO Y F. MELERO.