Jerez

Los lazos fraternales de las cofradías

  • Desde sus orígenes hasta el presente, las hermandades han sabido mantener estrechos vínculos de unión por diferentes motivos

Nazarenos de la Misión Redentora en el cortejo de Santa Marta, madrina de la corporación del barrio de Picadueñas.

Nazarenos de la Misión Redentora en el cortejo de Santa Marta, madrina de la corporación del barrio de Picadueñas. / vanesa Lobo

Las hermandades han sabido mantener una tradición en el ámbito de determinadas uniones que han sido selladas mediante cartas de hermandad. Los motivos que pueden llevar a dos corporaciones a unirse pueden ser diversos. Por cuestiones históricas, por depender de un mismo espíritu o vocación religiosa o por proximidad entre ellas. Una vez oficializada la unidad, las cofradías con carta de hermandad abren la posibilidad a sus hermanos a poder vestir la túnica nazarena en uno u otro cortejo. Asimismo, también se normaliza en estos hermanamientos la invitación oficial entre ambas para importantes actos como son funciones solemnes, convivencias entre hermandades, colaboraciones o simplemente prestarse atributos o elementos de sus patrimonios.

En Jerez, la proximidad entre ambas corporaciones unió para siempre a la Borriquita con la hermandad de la Cena. Aunque desde sus orígenes ambas hermandades están muy ligadas, la Soledad y el Transporte firmaron no hace mucho su carta de hermandad. La Reina fue vestida el día de su bendición con el ajuar de la otra Reina, la de la Porvera. Por su parte, es sabido de la unión que mantiene a las hermandades de las Angustias y el Santo Crucifijo de la Salud. Sus hermanos pueden vestir la túnica en ambos cortejos. En el Domingo de Ramos tenemos otro hermanamiento importante. La hermandad de la Coronación está unida a las Viñas por el paso de esta cofradía por los Desamparados, y también con el Cristo de la Expiración.

La hermandad de la Viga fue fundada por cofrades de la Piedad. De ahí que estas dos corporaciones estén hermanadas desde hace años. Además, la hermandad de la Paz de Fátima está también está hermanada desde hace poco tiempo con la de la Lanzada. Posiblemente porque comparten a muchos hermanos.

En ocasiones, estos lazos filiales se establecen entre distintos estamentos. Es el caso del Martes Santo con la hermandad que los Judíos de San Mateo que mantiene carta fraternal con la comunidad mercedaria. También existe esta relación mercedaria con el Santo Crucifijo de la Salud. Por su parte, la hermandad de las Tres Caídas, establece carta de hermandad con la de la Yedra. La antigua Dolorosa de San Lucas fue la Esperanza Coronada. La Amargura, tiene su carta de hermandad con el Cabildo Catedral por sus orígenes en el templo del Divino Salvador. Además en el caso de esta hermandad, también hay una relación estrecha con la hermandad de la Palma de Cádiz por uno de sus fundadores como fue el recordado Pepe Gómez.

Ya en la madrugada, la Yedra también tiene desde hace ya muchos años lazos de fraternidad con la hermandad de la Buena Muerte. Sin duda que un hermanamiento curioso que se disfrutaba cuando la Buena Muerte salía por la puerta de la Encarnación y la Esperanza subía por la antigua calle Hortas Cáliz. Se saludaban ambos pasos.

Por último habría que reseñar los lazos estrechos entre la hermandad del Nazareno con El Cristo de la Expiración y con la Piedad. Cristo y Nazareno son hermandades jerezanísimas. Por su parte, antiguamente, el Nazareno iba hasta el Calvario y tocaba la puerta de la capilla. La tradición marcaba que la Piedad saliera a recibirlos.

Además, con las nuevas corporaciones, las relaciones entre estas hermandades con las más antiguas son más que patentes. Ocurre con la Sed y el Santo Crucifijo, la Salud de San Rafael con el Cristo de la Expiración, La Salvación con la Piedad o Bondad y Misericordia con la Soledad. Las más añejas, sirvieron de madrinas a las nuevas. Como ocurrió entre el Soberano y el Nazareno o las Cinco Llagas con el Resucitado.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios