El mínimo exigido, y poco más

El ciclo integral del agua en la ciudad está un paso más cerca de ser gestionado por manos privadas. Ayer, se continuó con el procedimiento de adjudicación al darse a conocer la propuesta de la única mercantil que presentó oferta, la de la UTE (Unión Temporal de Empresas) conformada por dos sociedades vinculadas al grupo FCC (Aqualia Gestión del Agua SA y Tratamiento Industrial de Aguas Sociedad Anónima). Y, como era de esperar, la proposición económica apenas mejoró el mínimo exigido por el Ayuntamiento.

Así, el Consistorio recibirá 80,1 millones de euros por desprenderse de la gestión del agua durante los próximos 25 años (apenas 100.000 euros más que el mínimo exigido). Asimismo, el futuro concesionario se compromete a realizar inversiones por un importe anual de un millón de euros, la misma cuantía que planteaba el Consistorio. Según se establece en el pliego de condiciones que ha regulado este concurso, estas actuaciones deben ser consensuadas anualmente con el gobierno local y deben destinarse a la realización de mejoras en la red para abastecer nuevos suministros, en telecontrol y en renovación de los actuales sistemas. No obstante, se permitía la posibilidad de que los aspirantes presentaran otro tipo de mejoras para incrementar la puntuación de su oferta en el concurso. Así, la UTE Aqualia y Traina se ha comprometido a realizar actuaciones para detectar fugas de agua por un importe de 250.000 euros anuales y destinar unos 100.000 euros a campañas de comunicación. Todas estas cifras, tal y como establece el pliego, deben revisarse al alza cada año en función del Índice de Precios al Consumo (IPC) de cada año (el valor que se toma de referencia es el del mes de septiembre).

Fue a finales de 2011 cuando el gobierno local incluyó en un plan de ajuste para tratar de mejorar las cuentas municipales la posibilidad de traspasar a manos privadas la gestión del agua. Incluso, incluyó esta posibilidad dentro de las medidas para acogerse a un plan de pago a proveedores mediante un préstamo a través del ICO (Instituto de Crédito Oficial) para liquidar las facturas pendientes hasta el pasado año. En este documento, se establecía el traspaso del abastecimiento, saneamiento y depuración de aguas como una de las principales actuaciones para incrementar los ingresos municipales.

Así, si no surge contratiempo alguno en los siguientes pasos, el grupo FCC pasará a ocupar el papel de Ajemsa, la empresa municipal del agua, en marzo. En el momento de la firma del contrato, el Ayuntamiento percibirá la primera parte de la cuantía comprometida. Mientras, los 40 restantes los recibirá en un plazo máximo de un año desde que se suscriba el acuerdo.