El diestro Juan Ortega Pardo, que debutaba en la plaza de toros de Jerez de la Frontera el pasado viernes 23, podría ser sancionado tras comunicarse a la Delegación del Gobierno Andaluz en Cádiz que, pese a ser advertido de que no podría salir a hombros por las medidas frente al Covid-19 en los espectáculos públicos, requirió a dos personas para que lo llevaran en volandas por el ruedo al término del festejo, bajándose en el patio de cuadrillas y abandonando la el coso a pie.

Se vetan las salidas a hombros para evitar que no se guarde la distancia física en las aglomeraciones en torno al torero en el ruedo, en el tránsito por la puerta grande hasta la calle, y en las concentraciones de público tanto frente a las entradas principales como hasta la furgoneta.

Hay que recordar que la distancia física es una de las medidas imperativas y que es la que ha obligado a las empresas a reducir los aforos de las plazas de toros esta temporada y la anterior.

Juan Ortega había sumado una oreja de cada astado de su lote en la primera corrida de toros de Feria del Caballo de Jerez celebrada hace una semana. Alternaba con Julián López 'El Juli' y con Andrés Roca Rey, que cerraba plaza.

Se ha hecho constar esta incidencia en los antecedentes del festejo por lo que ahora se iniciaría el correspondiente procedimiento sancionador que podría terminar, si el instructor así lo estima, con una propuesta a la autoridad de sanción para Juan Ortega.

Y en este caso la autoridad estaba allí, porque en un burladero del callejón presenciaron el festejo no solamente Ana Mestre, delegada del Gobierno andaluz en Cádiz y titular de las competencias taurinas en la provincia, que es además la autoridad que autoriza el festejo, sino también el viceconsejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta de Andalucía, autoridad inmediatamente superior a nivel de toda la comunidad autónoma.

Por lo demás el festejo resultó ejemplar en cuanto al cumplimiento por el público de las medidas sanitarias obligatorias.