La denuncia elevada por el Consejo Regulador del vino a la Consejería de Agricultura por el uso ilícito en la etiqueta de un rebujito de una empresa granadina de los términos sherry, Jerez y Manzanilla de Sanlúcar, protegidos por la Denominación de Origen jerezana, ha surtido efecto inmediato.

Espadafor, la empresa en cuestión, anunció ayer en un comunicado su decisión de eliminar de la etiqueta las tres menciones protegidas, para mantener únicamente la alusión a la variedad de uva del vino con el que elabora el rebujito, la palomino, y que según explica, compra a una importante bodega de Sanlúcar. En la misma nota, la firma granadina que comercializa licores con y sin alcohol señala que las modificaciones ya se han efectuado.

La reacción de la empresa granadina no se ha hecho esperar, y después de que la Consejería de Agricultura enviara a sus inspectores para abrir expediente sancionador, los abogados de Espadafor mantuvieron ayer una reunión en Sevilla con el presidente del Consejo del jerez, Antonio Fernández, para zanjar la polémica.

En dicha reunión, y según informaron ayer desde la institución jerezana del vino, los abogados comunicaron la decisión de la empresa de renunciar al uso de los tres términos protegidos por la Denominación de Origen.

El Consejo Regulador del jerez espera ahora que Espadafor también retire del mercado los productos que ya habían sido distribuidos con las menciones sherry, Jerez y Manzanilla de Sanlúcar en su etiquetado, medida cautelar que solicitó a la Consejería de Agricultura por el temor al daño que pudiera ocasionar a las bodegas del Marco este uso ilícito ante el inminente inicio de la temporada de ferias de primavera en Andalucía.

En este sentido, los responsables del Consejo advirtieron ayer a los abogados de Espadafor que darán parte a la autoridad competente en caso de constatar que no se ha retirado del mercado el producto con la primera etiqueta para sustituirlo por la que se ajusta al anuncio hecho ayer por la empresa.

El Consejo instó a la Junta a incoar expediente sancionador y retirar del mercado el rebujito Sarandonga tras detectar un bodeguero la presencia del producto en la feria Alimentaria de Barcelona y tras constatar que la bebida ya había sido presentada oficialmente en Sevilla.