La calle Consistorio volvió a llenarse de banderas de sindicatos y pancartas reivindicativas para exigir el pago de las nóminas. Si las concesionarias de Urbanos Amarillos, Limasa y Acasa ya llevaban varias semanas 'plantadas' ante el Ayuntamiento, ayer se les unió la plantilla municipal que aún no había cobrado el mes de septiembre. Con algunas sillas de playa para descansar y megáfonos para hacerse notar, los trabajadores fueron llenando cada rincón de la céntrica calle a la espera de que la alcaldesa apareciera con el presidente de Diputación, José Loaiza, que ayer visitó la ciudad.

Ambos, junto a otros miembros del gobierno local, se pararon con cada colectivo que se había concentrado ante el Ayuntamiento para conocer de primera mano las necesidades de estos empleados. El único que faltó fue Limasa, y eso que la regidora popular, María José García-Pelayo, preguntó en varias ocasiones dónde se encontraba su comité para que Loaiza conociera su situación laboral. "La alcaldesa nos ha presentado y le ha comentado lo mal que lo estamos pasando y Loaiza, para que supiéramos cómo estaban las cosas, nos ha dicho que la Junta de Andalucía les debe cinco millones de euros en ayuda a domicilio", declaró tras esta inesperada conversación la presidenta del comité de Acasa, Encarnación Barrios, quien adelantó que en la asamblea que mantendrá hoy la plantilla se decidirá si "radicalizamos aún más nuestras protestas para que sean más fuertes. El comité lleva varias propuestas, pero son los trabajadores los que votarán qué calendario de movilizaciones vamos a seguir a partir de ahora". Hay que recordar que a la plantilla se le debe el 78% de la nómina de agosto y septiembre, y que el pago tendrá que esperar a que la Junta de Andalucía ingrese su parte del servicio de ayuda a domicilio. "No estamos dispuestos a cobrar en porcentajes, lo queremos íntegro de una vez. Ya no hay medias tintas", aseveró Barrios.

Con unos trabajadores de autobuses ya cansados de tantos días de huelga y unas siempre reivindicativas empleadas de ayuda a domicilio, el lema que ayer sonó con más fuerza fue el de la plantilla municipal. 'La lucha está en la calle. Hacia la huelga en el Ayuntamiento' era el lema que rezaba en una de las pancartas de la concentración. Entre el café y la tostada, los empleados municipales pidieron una respuesta a la incógnita de cuándo van a poder ver la nómina ingresada en sus cuentas, porque como señaló el secretario local de CCOO, José Manuel Trillo, "estamos a día 6 y no hay fecha para el cobro, que es lo más grave".

Como aviso a lo que puede venir en los próximos días, Trillo remarcó que "hoy se va a unir todo. La situación es complicada, los conflictos crecen a diario y las soluciones no llegan. Así que lo que estamos planteando es ver cómo se puede hacer una acción a lo grande". Por su parte, el portavoz de CGT, José García, con micrófono en mano se dirigió a los manifestantes para denunciar que "volvemos a las andadas. Con el otro gobierno el personal municipal tenía problemas para cobrar y con éste pasa lo mismo. Y para que quede claro, la CGT está en contra de cualquier medida del Ayuntamiento que atente a los derechos de los trabajadores. La CGT tiene errores, se equivoca, pero siempre está al lado de los empleados". Tras el discurso, García entró con algunos compañeros al Consistorio y consiguió hablar con el presidente de Diputación.

Así las cosas y tras conocer la situación de las concesionarias y la plantilla municipal, Loaiza manifestó que "estamos trabajando desde el primer día de la legislatura con la alcaldesa para facilitar la capacidad económica del Ayuntamiento". El presidente de Diputación avanzó que se está trabajando en varias operaciones "para ver si nos salen algunas cosas y así el Ayuntamiento pueda garantizar que en estos próximos días se desatasque la situación, que se puedan pagar las nóminas y lo máximo posible de lo que se adeuda".