El Mundial más extraño de la historia se pone en marcha para la categoría de MotoGP este fin de semana en el Circuito de Jerez con el Gran Premio de España, primera de las dos citas que el trazado jerezano va a albergar consecutivamente.

Después de ser la única de las tres categorías que se quedó sin debutar en Losail el pasado mes de marzo por la crisis sanitaria del coronavirus, MotoGP vuelve a la acción con un calendario de 13 carreras, algunas de ellas con citas dobles en un mismo circuito. Un reducido y compacto Mundial que se va a disputar en apenas cuatro meses y medio.

Nadie duda de que el rival a batir una vez más es Marc Márquez, que sale dispuesto a conquistar su quinto Mundial consecutivo y el noveno en total, lo que le igualaría con los nueve que tiene Valentino Rossi. El piloto del Honda Repsol se encargó este miércoles de despejar cualquier atisbo de duda sobre su estado físico tras la operación de hombro a la que se sometió el pasado mes de noviembre.

En efecto, Márquez se situó con el tercer mejor tiempo de la única referencia cercana que existe ahora mismo, dado que los test de pretemporada disputados en Sepang y Qatar fueron antes del confinamiento. El octocampeón lideró la primera tanda de los entrenamientos libres siendo el único que bajó del 1:38, aunque en la sesión de tarde, coincidiendo con la hora en la que se disputará la carrera este domingo, tanto Maverick Viñales (Energy Monster Yamaha) como Fabio Quartararo (Petronas Yamaha) lograron batir al de Cervera. Además, el 93 ha salido victorioso en las dos últimas carreras disputadas en Jerez.

Maverick Viñales aspira a luchar por el campeonato.

La lucha sin cuartel contra el actual campeón la encabezarán precisamente estos dos pilotos. Viñales por fin parece haber tomado junto a Yamaha el camino correcto para hacer una moto más competitiva que en cursos anteriores. De hecho, afirmaba este miércoles que han ganado tanto en agarre como en el paso por curva, lo que le permite frenar más tarde y atacar mejor en los giros.

Quartararo, por su parte, ya fue 'rookie' del año en 2019 y en el último tramo de la temporada fue quien más difíciles puso las cosas a Marc, aunque sin llegar a rematar en carrera después de sumar varias 'poles'. Contar con una moto de fábrica y el salto al equipo oficial en 2021 no son sino otros alicientes que empujarán al francés, que este viernes tendrá que ver los primeros 20 minutos del FP1 desde el box al ser sancionado tras su entrenamiento privado en Paul Ricard, donde utilizó una moto con elementos prohibidos por la FIM.

El tercero en discordia es un Valentino Rossi que ya sabe que la próxima temporada dejará el equipo oficial de Yamaha para 'bajar' al Petronas, un movimiento que algunos excompañeros han calificado de falta de respeto para el nueve veces campeón del mundo. Sin embargo, el italiano sigue a sus 41 años con el deseo de lograr su décimo título y no quiere aún cejar en el empeño.

Marc Márquez, en la rueda de prensa de pilotos junto a Fabio Quartararo.

En un campeonato tan corto y que va a exigir físicamente lo máximo de cada piloto, el estado de Andrea Dovizioso es una auténtica incógnita. El de Ducati, que no ha renovado por la firma de Borno Panigale, se sometió a una operación de clavícula hace un par de semanas tras el accidente que sufrió practicando motocross. En el Test del miércoles sólo pudo ser 15º, aunque admitió que se tomó el entrenamiento como una mera toma de contacto. En este sentido, peor le fueron las cosas a su compañero Danilo Petrucci, con una fuerte contractura en el cuello después de una caída.

Sí ha dado un nuevo paso adelante Suzuki Ecstar. Álex Rins se colocó en la cuarta plaza del entrenamiento, mientras que Joan Mir también acabó en el Top10. Rins ya fue muy competitivo en 2019, con dos victorias en Las Americas y Silverstone y un segundo puesto en Jerez.

Sorprendió gratamente este miércoles Aleix Espargaró con un sexto mejor tiempo a lomos de la Aprilia, mientras que su hermano Pol, que dará el salto la próxima temporada a HRC, acabó por detrás de la KTM de Miguel Oliveira.

En cuanto a Álex Márquez, muy lejos de los mejores con la misma moto que su hermano Marc, parece dar la razón a quienes han decidido que en 2021 'baje' al LCR de Lucio Checchinello para que vaya adaptándose a la MotoGP.