El Ministerio de Defensa ha contestado negativamente a un grupo de capitanes de la Escala a Extinguir de la Infantería de Marina que había elevado una queja al sentirse discriminados en las promociones y ascensos en la carrera militar. El Ministerio parece dar por buena la situación en la que están estos militares, alrededor de una veintena, y la mayoría con destino en la provincia, en Rota o San Fernando, donde se encuentra una gran parte de la Infantería de Marina de las Fuerzas Armadas.

Estos capitanes pertenecen a esta Escala, llamada a Extinguir, porque en su día no decidieron hacer la adaptación para integrarse en la nueva escala surgida a partir del Plan Bolonia. Lo hicieron "amparados en las expectativas que les daban sus mandos y con la promesa de que la no integración no acarrearía consecuencia negativa alguna en cuanto a ascensos, destinos o funciones". La adaptación podría suponer movilidad geográfica, cuando la mayoría de los afectados supera ya los 45 años y los 25 años de servicio.

Así que en julio de 2011 enviaron una queja al Ministerio de Defensa al entender que en dos años se había reducido en un 50% el cupo fijado en la plantilla de esta Escala para promociones y "que los efectivos para el ascenso a comandante estaban siendo asignados a la Escala de Oficiales". En estos días, casi un año después de enviar el escrito, Defensa asegura que la situación es la correcta.

Sin embargo, ellos seguirán exigiendo por vía legales lo que creen justo, presentando un recurso de reposición, y dispuestos a acudir a la vía jurisdiccional ante la Audiencia Nacional, sin dejar de lado otras instancias nacionales o supranacionales.

Argumentan que "tienen una dilatada preparación y experiencia en el cuerpo y comparten con sus compañeros, que sí se integraron, su día a día en sus funciones y en escenarios donde están en juego sus vidas y la de sus subordinados con lo que cualquier atisbo de recelo o discriminación debería ser eliminado", añaden.