Provincia de Cádiz

Fondo de compensación del amianto, justicia para los afectados

Afectados por el amianto contemplan una radiografía en la que se observa los estragos del material en los pulmones. Afectados por el amianto contemplan una radiografía en la que se observa los estragos del material en los pulmones.

Afectados por el amianto contemplan una radiografía en la que se observa los estragos del material en los pulmones. / Julio González

Escrito por

· Amaya Lanceta

Redactor

"Es una cosa de justicia. Llega tarde, pero llega. Pero que nadie se lleve a engaños: queda una parte importante, la redacción del reglamento de aplicación de la ley y que se aprueba la exención fiscal para las indemnizaciones". El vicepresidente de la Asociación de Afectados por el Amianto del Sector Naval de la Bahía de Cádiz, Pepe Casas, habla del fondo de compensación para víctimas del amianto que ha aprobado este mes el Senado –y que salió publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el día 20– y reclama mejoras.

"La satisfacción es grande. Estamos muy contentos después de tantos años de reivindicaciones sindicales y de las asociaciones de víctimas", reconoce Casas, que siempre ha hablado del "derecho de los afectados" y de la "obligación del Estado por las responsabilidades de las empresas que sabían que era cancerígeno y siguieron usando en amianto". El Estado, recuerda, tenía responsabilidad en la vigilancia de la salud en el trabajo "que no cumplió".

El texto de Ley del Amianto que sale del Senado sin modificaciones esgrime una serie de datos para argumentar la necesidad de crear el fondo de compensación y dar respuesta a las personas afectadas por el también conocido como asbesto. Así se indica que entre 1994 y 2008 en España se contabilizan hasta 3.943 personas fallecidas vinculadas directamente con este material. Se apunta a que en el siglo XX se importaron unas 2.600.000 toneladas, con el pico de consumo ubicado entre 1970 y 1980. Tres cuartas partes se destinó a fibrocemento para construcción. La comparación con Francia –entre 1960 y 1995 fueron 2.300.000 toneladas, un 30% menos que en el país vecino– se hace para extrapolar sus cifras de diagnósticos de mesoteliomas: 1.000 casos al año, por lo que para España se estima un promedio de 700.

Durante la jornada informativa que la Asociación de Afectados por el Amianto del Sector Naval de la Bahía De Cádiz organizó en San Fernando en marzo, se ofrecieron otros números más acotados a esta zona. Por el Puerto de Cádiz pasaron entre 1965 y 1980 más de 269.000 toneladas de amianto con los astilleros de la Bahía como destino. Hace un año advertían del repunte de casos vinculados a este mineral.

SECTORES

La construcción, la industria naval, la aeronáutica o la automoción son los principales sectores en los que se utilizó el amianto por sus propiedades aislantes, de resistencia al calor y al fuego. De ahí que también se aprovechara en la industria eléctrica, química, textil y nuclear. Se usaba en barcos, canalizaciones y depósitos de agua, cubiertas y aislamiento, incluso en instalaciones industriales para reducir el riesgo de incendio.

Por eso hay damnificados de distintos sectores productivos, incluso hay estibadores afectados por las descargas del mineral en los puertos y "militares enfermos tras hacer vida en los barcos, donde el amianto se ha ido degradando y respirando", expuso Pepe Casas en la jornadas sobre amianto que la asociación con sede en San Fernando celebró hace unos meses. En ese encuentro tanto Casas como el doctor Antonio Escolar o el abogado Alejandro Zapata alabaron al Ministerio de Defensa por los acuerdos alcanzados sin juicio con los afectados. 

Pero además los tentáculos del asbesto también se extendieron a los familiares de los trabajadores, por la ropa que se llevaba a casa a limpiar y que se sacudía con la consiguiente expansión y aspiración del polvo de amianto; o en las zonas residenciales cercanas a áreas industriales.

ENFERMEDADES

Una de las enfermedades que provoca el amianto es el mesotelioma de pulmón –el cáncer más agresivo que puede afectar a este órgano-. Tanto esta como el cáncer común de pulmón derivado del asbesto aparecen entre  20 o 30 años después de haber estado en contacto con este material. 

El mesotelioma es un cáncer que se localiza en la pleura, la membrana exterior del pulmón, y es muy agresivo. Tiene un 98% de letalidad y la muerte se produce entre seis y nueve meses después del diagnóstico. El 95% de los casos corresponde a la exposición al amianto.

Retirada de amianto durante el derribo de las casetas de La Casería en San Fernando. Retirada de amianto durante el derribo de las casetas de La Casería en San Fernando.

Retirada de amianto durante el derribo de las casetas de La Casería en San Fernando. / Julio González. (San Fernando)

Otras enfermedades del aparato respiratorio que pueden provocar son la fibrosis pulmonar o la asbestosis, una enfermedad asociada directamente a esta exposición al amianto que se desarrolla con el paso de los años.

En España se estima que ha habido entre 2003 y 2009 unos 7.154 casos de mesotelioma, "comprobado científica la relación directa" con el consumo de amianto, según los datos que recoge la Ley aprobada. Para 2023 se calcula un número ascendente y a partir de ahí una estabilización o el descenso.

Evitar la judicialización

"Con el fondo de compensación se intenta evitar la judicialización del tema", comenta Pepe Casas, que advierte de que este camino mezcla ingredientes duros para quienes luchan o han luchado por su vida por la enfermedad: el alto coste económico, la lucha con la Seguridad Social, las mutuas y las empresas, la desaparición de la empresa responsable o la dificultad de identificarla en la actualidad después de escisiones, absorciones o cambios de denominación, la complicación de demostrar la exposición al amianto si no se trabajaba con él directamente o el coste emocional. Pero además se intenta dar respuesta a los afectados del ámbito familiar o ambiental que tienen vedada esta vía por no haber una empresa a la que reclamar indemnización por compensación del daño.

"Esta sociedad tiene una deuda con los afectados y con los que saldrán", advierte el vicepresidente de Afectados por el Amiento del Sector Naval de la Bahía de Cádiz. Mientras que Francia, Bélgica, Italia, Reino Unido o Países Bajos cuentan con fondos de compensaciones desde hace años España se ha resistido, algo que ahora se resarce con su aprobación por ley. Para este año se consiguió una consignación en los Presupuestos Generales del Estado de 25 millones de euros, a todas luces escasa, para este sindicalista ya retirado de Navantia.

La exención fiscal, entre los pendientes

Casas deja claro que se trata de una cuantía "insuficiente" para el número elevado de afectados que puede haber y quieran hacer los trámites para acogerse al fondo de compensación del amianto. La Ley recoge estas consignaciones o transferencias de los Presupuestos Generales del Estado, además de otras posibles aportaciones. Entre ellas se plantean cantidades que se obtengan de la subrogación de las personas afectadas o sus causahabientes en vía judicial, de las sanciones impuestas por la autoridad laboral por incumplimientos en materia de seguridad y salud laborales relacionadas con el amianto, de las rentas o frutos del propio fondo y otros.

Lo fundamental, algo en lo que han incidido CCOO y UGT, además de las asociaciones de afectados por el amianto, es la exención fiscal que debe incluir las compensaciones del fondo. "Actualmente tal y como ha quedado tienen que pagar tributación, que puede ser de hasta el 45%", detalla el sindicalista. "Si te indemnizan con 20.000 euros por ejemplo y tienes que devolver ese porcentaje, no sirve de nada. Los afectados seguirán yendo a los tribunales que es lo que intentar evitar, la judicialización", advierte.

El comunicado emitido por el sindicato UGT exponía la situación tras aprobar el Senado la ley: "El texto aprobado todavía presenta una grave carencia: la falta del establecimiento de la exención tributaria para las indemnizaciones. Las indemnizaciones obtenidas en los tribunales están exentas de tributar, al igual que sucede con las establecidas en algunas leyes, por ejemplo las previstas para las víctimas del terrorismo o las personas afectadas por el VIH, pero con el texto aprobado las víctimas del amianto que recurran al Fondo se verán obligadas a tributar en los tramos más altos del IRPF, que en 2022 se sitúan entre el 45% y el 47%".

Concentración por el fondo de compensación del amianto que se produjo en noviembre en las puertas de Navantia San Fernando. Concentración por el fondo de compensación del amianto que se produjo en noviembre en las puertas de Navantia San Fernando.

Concentración por el fondo de compensación del amianto que se produjo en noviembre en las puertas de Navantia San Fernando. / D.C.

"Desde UGT, la Federación Estatal de Asociaciones de Víctimas del Amianto y CCOO hemos reclamado a los grupos parlamentarios que apoyan al Gobierno la inclusión de la exención tributaria en el texto de Ley del Fondo de compensación, reclamación que no se ha visto atendida en el trámite parlamentario. Sin embargo, todavía existe una oportunidad de solucionar esta cuestión, con la inclusión de una enmienda en la Ley de los Presupuestos Generales del Estado que establezca la exención modificando el artículo 9 de la Ley 18/1991, de 6 de junio, del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas", indicaban sobre la solución.

Pepe Casas menciona la última indemnización conocida concedida por los tribunales a la familia de un fallecido ex trabajador de la aeronáutica CASA de más de medio millón de euros y que no tendrá que tributar como ejemplo de la diferencia entre una opción y otra, a pesar de la que vía judicial resulta compleja y dura. "Se le ha explicado a los diputados, los sindicatos y las asociaciones intervinieron en la comisión de trabajo y en el Senado, y esperamos que lo solucionen", añade. "¿Cómo no va a estar exento de tributación fiscal?", hace una pregunta retórica. 

Otra cuestión fundamental para el vicepresidente de la Asociación de Afectados por el Amianto del Sector Naval de la Bahía de Cádiz es la necesidad de que en el reglamento que debe redactarse para la aplicación de la normativa se detalle las diferentes enfermedades que puede provocar el amianto y por la que los afectados recibirán compensación, y por supuesto la cantidad que se fija para cada una de ellas. "Si no no sirve de nada", puntualiza.

Entre los éxitos, Casas señala que entrara en el texto "el tema familiar y ambiental". "Personas afectadas sin contacto directo en lugares de trabajo, pero que sí aspiraron amianto a través de la ropa de trabajo que se llevaba a casa a lavar y que se mezclaba con la ropa de la casa o se sacudía en el hogar; o que vivían en los entornos de las fábricas y por tanto la vecindad se llenaba de amianto", destaca.

De justicia

"Es un acto de justicia para unas víctimas con las que el Estado español tiene una deuda contraída ya que fue uno del estados de la UE que más tardaron en prohibir de manera definitiva el uso de cualquier tipo de variedad de amianto", expone UGT en el comunicado emitido tras la aprobación de la Ley. Resalta una palabra, "justicia", la misma que Pepe Casas, que conoce muy bien el panorama devastador del amianto en la Bahía de Cádiz. 

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