"Horroroso, horroroso y horroroso". Así describe los hechos una vecina de la zona. Repite la misma palabra una y otra vez, con las manos en la cara. Esta mujer, que trabaja en un negocio próximo al bloque, explicó ayer que vio a la víctima tirada en el portal mientras un grupo de personas intentaba ayudarla. "Trataban de taparle la herida, pero seguía saliendo sangre por el pantalón y por la nariz", destaca en declaraciones a Europa Sur.

María del Mar Sevilla, natural de la localidad de Tarifa, era una persona muy conocida y querida en esta barriada algecireña. "Llevaba más de veinte años viviendo aquí", añade una vecina del mismo edificio donde residía la víctima, que habitaba en el décimo A. Además, la mujer regentó un bar en las proximidades, famoso por sus caracoles. De hecho, en la puerta del inmueble podía leerse ayer un cartel con el siguiente texto: "Comienza una nueva temporada caracolera. María del Mar los prepara muy ricos".

La fallecida era viuda y tenía dos hijas. Además, perdió otro hijo hace años en un accidente de tráfico. "La medalla dorada que llevaba colgada en el cuello contenía una fotografía de su niño", explica otra vecina, quien insiste en que el bolso de la mujer se encontraba en el portal: "Ella misma les dijo a quienes le ayudaron que le faltaba la medallita de su hijo".

La Policía Nacional insistió ayer en que las investigaciones apuntan que el móvil del delito fue de tipo económico. "No mediando relación, al menos en primera instancia, entre la víctima y el supuesto delincuente", explicaron desde la Comisaría de Algeciras, que subrayaron que los agentes procedieron ayer -a primera hora de la tarde- al registro domiciliario de la vivienda del detenido, por la comisión judicial junto a los efectivos de las fuerzas de seguridad encargados de la investigación.

"Un chaval de la barriada vio al que han arrestado y le llamó la atención porque le conocía y llevaba la capucha de la sudadera puesta, a pesar del calor que hacía a esa hora del día", resalta el propietario de un negocio de la zona; quien añade que la ambulancia se llevó a la víctima aún viva, pero ya inconsciente.

Los vecinos se encontraban ayer bastante consternados por la noticia y no dejaban de hablar del tema, reunidos en corro a las puertas del edificio o en los establecimientos cercanos.