"El Teatro sigue trabajando", aseguró este martes la directora del Villamarta, Isamay Benavente. Y es que tras las cancelaciones de los espectáculos previstos hasta final de esta temporada y la reubicación de muchos de ellos en los próximos meses, el Teatro confía en reabrir las taquillas en un par de semanas, a mitad de mayo. "Lo haremos con todas las precauciones, con entrada de uno en uno y todo el protocolo necesario. Hemos seguido teletrabajando desde casa, unos en la programación, producción está con la lírica porque con los cambios, el reparto no se puede mantener; y las miles de reuniones que ha habido para las redacciones de documentos. Y ahora estamos trabajando en los protocolos tanto para sala como para artistas en prevención de riesgos. Ha sido, la verdad, una incesante actividad desde casa", explica Isamay.

Respecto a la próxima edición del Festival de Jerez, ya se está preparando la oferta de cursos, que se suele presentar en junio junto con la nueva programación del coliseo, y espera que este año también pueda ser así. Y es que hay que recordar que el cierre del Festival de la presente edición (acabó el 7 de marzo) casi roza el inicio del confinamiento. "Lo más milagroso es que no haya afectado físicamente, que sepamos, a maestros y artistas, Cursillistas ya lo desconocemos, pero ninguno nos ha dicho nada", añade.

Benavente sí confirma que el Teatro ya abrirá la próxima temporada. "Estamos preparando todo para finales de septiembre pero atentos a lo que se vaya decidiendo desde el Gobierno central. Debemos esperar a que pasen estas fases primeras e ir viendo cómo evoluciona todo. Yo espero que a partir de finales de septiembre u octubre llegue esa nueva normalidad, aunque habrá muchas más medidas de higiene para todos. Esperamos que en otoño podamos retomar la programación y en eso estamos trabajando ahora mismo".

El equipo técnico del Villamarta se incorporará este lunes para ir preparando el Teatro para el otoño, "ya que cuando nos fuimos lo dejamos todo tal como está ahora. Todas estas reuniones que hemos tenido nos han servido también para darnos cuenta de que estamos todos en el mismo barco. Es cierto que cuando ya estábamos encauzando la situación del Villamarta tras unos tiempos complicados, ahora volvemos a una situación muy difícil. Que el público se relaje, que vuelva otra vez... Pero bueno, soy una persona optimista y confío en que poco a poco iremos recobrado la normalidad. También confío mucho en la ciencia y espero que salga un remedio pronto que nos dé la tranquilidad total y retomar nuestra vida".

"El Teatro -concluye- tiene que seguir, es un servicio que necesitamos y necesitamos retomar nuestra vida cultural también con todas las medidas que haya que tomar. Si hay que ir con mascarilla a escuchar un concierto pues así iré. Nos hace falta un poco de medicina para el alma, un impulso para continuar, una alegría en ese sentido".