La sesión de ayer fue de gran volatilidad tras la publicación del dato de inflación en EEUU, con predominio de los avances en las bolsas europeas.

El IPC en enero en EEUU se quedó en el 6,5% interanual, por debajo del 6,6% de diciembre, pero un 0,3% por encima de las expectativas del mercado. Evolución similar a la de la tasa subyacente, que se situó en el 5,6% interanual (frente al 5,5% esperado). La reacción indefinida y volátil que mostraron los mercados se debatió entre el aspecto negativo de una menor moderación de la inflación de lo esperado, y el positivo de que el proceso de desinflación continúa pese a todo.

Una evolución de los precios en EEUU que es consistente con la evolución del mercado laboral y que añade mayor incertidumbre respecto a la política monetaria de la Fed. El sostenido incremento del precio de la vivienda y de los alimentos o el repunte de la energía tras tres meses de caídas mantiene la presión sobre la autoridad monetaria.

No obstante, la tasa interanual se ha situado en su menor nivel desde octubre de 2021, destacando la moderación de los precios de los servicios (excluyendo vivienda). Asimismo, la evolución de los precios reduce los temores a efectos considerables de segunda ronda.

En este contexto, el Íbex 35 avanzó un 1,78% hasta superar los 9.200 puntos. Entre sus componentes, las mayores revalorizaciones se situaron en Telefónica (+3,56%), Arcelormittal (+2,58%) y Acerinox (2,01%). En contraste, las mayores caídas se registraron en Acciona (-1,38%), Mapfre (-1,26%) y Sacyr (-1,14%).

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