Gran Lunes Santo

De forma consciente, he dejado pasar unos días desde que el pasado Lunes Santo realizamos nuestra estación de penitencia. Lo he hecho porque quería que fuera una reflexión serena, sosegada, tranquila,en la que poder expresar mis sentimientos como hermano mayor.

En los 57 años que llevo en nuestra hermandad, éste, sin duda, ha sido el mejor Lunes Santo de todos. Tras cuatro años sin poder hacer nuestra estación de penitencia, por diferentes circunstancias (COVID, climatología…), este 2023 ha supuesto el año de la explosión definitiva de la hermandad de la Cena en la tarde del Lunes Santo.

Cerca de 400 nazarenos nos han acompañado. Cerca de cuatrocientos hermanos que, con su túnica y con una actitud intachable pese a los parones que sufrimos, dieron luz tanto al paso de misterio, impecable como acostumbra, como al palio de Santa María de la Paz y Concordia, que por fin, se ha paseado de manera impecable por las calles de nuestra ciudad.

Por tanto, sólo me queda como hermano mayor felicitar al capataz de la cofradía, Martín Gómez Moreno, por su impecable gestión al frente de las cuadrillas de la Cena, y por sus cuarenta años como capataz del paso de misterio de nuestra corporación. Y quiero que mi gratitud llegue a todos y cada uno de los costaleros que integraron ambas cuadrillas. Sois un orgullo para vuestra hermandad.

Ojalá que todos los hermanos que nos escoltaron en nuestra estación de penitencia, o que realizaron un servicio desinteresado el pasado Lunes Santo, sientan al menos la mitad del orgullo y la satisfacción que siento yo como hermano mayor de la Cena.

La salida procesional de 2023 quedará en nuestra memoria mucho tiempo, sin duda. Pero os puedo asegurar que jamás se me olvidarán los sentimientos que tuve que contener el pasado Lunes Santo.

Gracias, de corazón, a todos. Yo ya me puedo morir tranquilo.