El Íbex 35 consiguió cerrar la sesión de ayer en positivo, al anotarse un ligero avance del 0,12% que no fue suficiente para recuperar la cota de los 9.600 puntos que perdió en la jornada anterior, en una semana marcada por las tensiones geopolíticas entre Estados Unidos e Irán.

El selectivo madrileño abrió en rojo tras intensificarse las amenazas entre ambos países después de que la base aérea de Al Asad en la provincia iraquí de Anbar, que alberga tropas estadounidenses, sufriese un ataque con misiles lanzado por Irán en respuesta a la muerte del general iraní Qasem Soleimani, fallecido en un ataque estadounidense en el aeropuerto de la capital iraquí.

Sin embargo, las tensiones se suavizaron después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asegurase en su cuenta de Twitter que "todo está bien".

Poco antes del cierre del mercado, el mandatario ofreció una rueda de prensa en la que informó de que ningún americano fue herido por el ataque iraní, que solo provocó ligeros daños materiales, y apuntó que "parece que Irán está en retroceso", un supuesto repliegue que es "algo bueno para todas las partes aludidas y algo muy bueno para el mundo".

En este escenario, el selectivo cerró en 9.591,4 puntos. Las mayores subidas las presentaron Acerinox (+1,46%), Arcelormittal (+1,24%), Sabadell (+1,09%) y BBVA (+0,96%).

El resto de las principales bolsas europeas también finalizaron la jornada en verde, con avances del 0,01% en Londres, del 0,31% en París, del 0,71% en Fráncfort y del 0,46% en Milán.

La prima de riesgo española descendió hasta 64 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,427%.