Trump responsable del caos

La imagen de empresario de éxito de Donald Trump en el proyecto de convertir la franja de Gaza en una nueva “Las Vegas” lleva camino de convertir, que a poco que entren las máquinas, para construir decenas de casinos de juegos, de locales de ofrecimiento de sexo a cambio de dinero, aparecerán los huesos, espíritus de tantos niños, ancianos, mujeres asesinados bajo el titular de guerra de defensa de los israelitas.

Netanyahu es un mero ejecutor de los planes de negocio de Donald Trump. Las empresas del ocio invertirán en cambiar la imagen de muerte de tantos niños, ancianos, mujeres, que lo único que quieren en tener una casita, colegios para los niños y niñas, salarios para alimentar a su familia y darse un paseo o un baño a orillas del Mare Nostrum.

La franja de Gaza rodeada por Egipto e Israel, es un lugar deseable para un nuevo emporio de la industria del ocio, el divertimento para los ricos norteamericanos, que están cansados de historia y lo que desean pues como los ricos de todos lados: que le sirvan el resto de los mortales. Igual que hacen los emiratos, países mayoritarios de creencias musulmanas. Países de mucho dinero y escasa, o nula, democracia, en donde la mano de obra es de terceros países sin derechos ciudadanos.

Trump fue votado por segunda vez por la mitad de la ciudadanía, las grandes fortunas y las grandes ciudades a base de dólares. Trump repite “Make America Great Again”: “Que Estados Unidos vuelva a ser grande”.