Se acabaron las medias tintas

PARA los que aún opinan que el empate con Italia fue un fracaso generado por la torpeza del seleccionador y también para los que creemos en la pericia de Vicente del Bosque además de estar convencidos de que la cosa no sólo no llegó a fracaso, sino que fue un resultado aceptable, a todos les recuerdo que, llegada que sea la hora de ganar como sea, España está en condiciones de repetir gestas. Comoquiera que las sensaciones recibidas por el juego exhibido ante un hueso como la tetracampeona Italia han sido buenas y Eire nunca nos complicó la vida, el futuro del equipo nacional lo presumo diáfano desde una óptica realista.

¿Y cuál será el diseño del seleccionador para este choque con la católica Irlanda? Conociendo la rusticidad de una defensa de piñón fijo, jugar sin referencia no lo veo nada mal. Sería la forma de que se sintiesen llamados desde varios sitios a la vez sin saber dónde acudir. Dicen que Trapattoni volverá al catenaccio, pero no me imagino a esa tropa verde, tan agresiva y pundonorosa, con el corazón y la cabeza igual de calientes, someterse al encorsetamiento de lo que les predique en la pizarra un extranjero. Seguro es que Irlanda irá siempre al frente y de frente, algo que si se intenta sin balón es como ir a pegar trompazos o a pelearse con molinos de viento.

Teniendo la pelota, que es lo que ha llevado a España al Olimpo en que vivaquea, más de la mitad del camino estará recorrido. Si a eso se le añade un ensanche del campo, mejor; si es con ariete no se sabe si será bueno o no. Particularmente creo que ante el rival de esta noche en la antigua Danzig, en plena orilla sur del Báltico, la forma de ganar sólo pasa de manera exclusiva por ser fieles a la filosofía que condujo a los éxitos. Con ariete o sin ariete, mejor haría Del Bosque en sincronizar los cimientos para que no pase como contra Italia, que hubo que remar para levantar un marcador en contra. Afortunadamente, Irlanda no es Italia, y teniendo el balón...