Marco Antonio Velo
Jerez: la calle Don Juan, Luis Ventoso, Loreto y el gesto de María Luisa
Jerez íntimo
Tras la finalización de la guerra incivil española, la práctica totalidad de los pueblos y localidades de nuestro suelo patrio celebraba anualmente cuanto venía en denominarse el Día de la Victoria. Conste en acta nuestro desapego de todo posicionamiento guerracivilista. Ya bien se han encargado -con bondad, con nobleza, con renuncias, con olvido pacificador- nuestros heroicos abuelos y nuestros afanosos -y esforzados- padres -ambas generaciones a la misma vez- de procurar enterrar el hacha de guerra al respecto de cuanto ya sólo debe considerarse pasto de olvido. Otro enfoque recae, eso sí, sobre el interés puramente local de un acontecimiento descriptivo de la época. Dicho esto, y a partir de una fotografía punto menos que llamativa, he consultado varias fuentes -documentales y conversacionales- para apuntar que Jerez conmemoró el tercer aniversario de la Victoria el Miércoles Santo 1 de abril de 1942. La ciudad amaneció con un aspecto propio de las grandes fiestas. Era costumbre que los comercios cerraran sus puertas y se paralizara toda actividad industrial durante la celebración de estos actos. Las calles más céntricas fueron pobladas por multitud de personas. Los jerezanos se alineaban en balcones y azoteas.
Minutos después de las once comenzarían a congregarse en la Plaza de los Reyes Católicos -Plaza del Arenal- y alrededores las llamadas “fuerzas de la guarnición” y además del siguiente modo: el Regimiento de Infantería número 82 formó con seis compañías con bandera, escuadra y banda, apoyando su cabeza en la calle Ramón y Cajal esquina a la de General Franco y mandando las fuerzas el teniente coronel Miguel Casanova. Por su lado, el Regimiento de Artillería número 74 formó con tres baterías -una pie a tierra con escuadra y banda que era la escolta de su Estandarte y dos baterías con cañones motorizados. La batería pie a tierra apoyaba su cabeza en la calle Ramón y Cajal esquina a la de Calvo Sotelo, frente a la plaza de los Reyes Católicos, comandada por el capitán Manuel Sánchez Molero. Las baterías motorizadas a cuyo frente iban los capitanes Francisco Iglesias Marín y Jorge Moreno se situaron en las dos avenidas laterales de la plaza. El Depósito de Recría y Doma integrando un grupo de dos escuadrones, pie a tierra. Asimismo, a continuación de la batería de Artillería a pie, mandando aquéllos el comandante José Gil Ramírez. Seguidamente figuraría una compañía del Ejército del Aire al mando del capitán José Jiménez Freyle. En última instancia, una conocida Centuria de Voluntarios del Frente de Juventudes de Falange a cuyo frente destacaba Mariano López Cepero.
Con los honores de ordenanza se destacaron la bandera del Regimiento de Infantería, que ocupó el centro al pie de la escalinata del altar levantado ante el monumento del general Primo de Rivera, colocándose a la derecha de aquélla el estandarte del Regimiento de Artillería Sebastián Aranda y del Río, sentándose a su derecha el teniente del Ejército del Aire Emilio Duarte y Ruiz de Colunga, en representación del teniente coronel del mismo Arma Luis Pardo Prieto; teniente coronel de Caballería Luis de Agar y jefes y oficiales de los distintos cuerpos y unidades de la guarnición. A la izquierda del altar tomó asiento el alcalde, Eduardo Delage Atané, sentándose a su derecha el jefe local de la Falange Tradicionalista y de las Jons José de Mora Figueroa. Igualmente otros lugares serían ocupados por los Delegados de Servicios de la Falange, una amplia representación de la Sección Femenina, así como el Ayuntamiento -en corporación-: léase: los tenientes de alcalde Andrés Fereán López, Sebastián Carrasco Ruiz, José Ignacio Domecq González, Alberto Durán Tejera, Ricardo Gonzalo Guerra, Pedro García Pelayo y Trevilla, gestores Joaquín y Rafael Argudo Rivero, Rafael Almadana Blanco y Miguel Sánchez Durán; secretario accidental Modesto Marín Ruiz, mayordomo Francisco Mariscal Moreno y capellán de la ciudad Bartolomé Orellana… Subdelegado de Hacienda Cecilio Guerra Retortillo; magistrado del Trabajo Eduardo Monzón y Fernández Trujillo, juez de Instrucción Marcelo Rivas Goday; director del instituto Manuel Chamorro Latorre, presidente y secretario de la Asamblea Local de la Cruz Roja Manuel María González Gordon y Purificación García y Pérez Caballero, así como otras representaciones oficiales.
La climatología favorecía la ambientación de tantísima gente congregada en el centro neurálgico de Jerez. Estuvo presente la comisión receptora de autoridades, a saber: el comandante de Caballería José Fernández Franch, capitán de Artillería José Paré Marquez y el teniente provisional del mismo arma Eusebio Hortas Rodríguez. Mandaba la línea el teniente coronel de Artillería, señor García de Paredes. Ofició la Santa Misa el capellán mayor del Depósito de Recría y Doma Alberto López Polo. Interpretó la banda municipal de música composiciones escogidas ex profeso para la ocasión. Terminada la Misa de Campaña, las autoridades se trasladaron a pie a la calle Ramón y Cajal. Las fuerzas destilaron al cabo por este orden: Regimiento Mixto de la Infantería número 82, Regimiento de Artillería número 74 y, acto seguido, la batería a pie del mismo, escuadrones de Caballería y Compañía de Aviación y la Centuria de Voluntarios del Frente de Juventudes de la Falange Española. Por veces más publico se apiñó a lo largo de las calles Ramón y Cajal y Alameda del Marqués de Casa Domecq y calle Marqués de Casa Arizón. Aplaudieron a las tropas hasta su llegada a la calle Ponce.
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