Diario de las Artes

Bernardo Palomo

Las lúcidas proposiciones del diseño

DANI DIOSDADO. Sala de Exposiciones de la Escuela de Arte Iconografía picassiana

Daniel Diosdado.

Daniel Diosdado.

La trayectoria artística de Dani Diosdado, ya, está inmersa no sólo en una dimensión de solvencia creativa sino en un unánime reconocimiento de la exigente profesión - algo que no es usual por la propia complejidad que plantean sus miembros-. Nadie pone en duda a estas alturas que estamos ante un serio creador en posesión de un lenguaje personal y único donde se manifiestan los rigurosos conceptos de un diseño que él cada día hace más grande. Su trabajo se sustenta en varios factores que, creo, son claros y tremendamente definitorios. Por un lado en su determinante potestad de creador nato, de autor con mayúsculas, de sabio entendedor de la esencia de cualquier situación para desde ella acceder a las posiciones artísticas que ilustren lo real. Es, por tanto, artista preparado, conocedor de todo lo que se cuece en el mundo artístico y, sobre todo, con un potencial creativo importante basado, principalmente, en una técnica poderosa y una visión creativa sin resquicio alguno para la duda. Además, el diseñador nacido en el Portal no elude la importancia de la tradición del diseño existente en la ciudad, la mirada en aquellos grandes dibujantes que llevaron a las artes gráficas de Jerez a ser de las más significativas. Con tales buenos argumentos, Dani Diosdado se nos aparece como creador total; alguien que no ha llegado a esta situación por generación espontánea sino que, a su realidad de trabajador incansable y de buscador de esencias, hay que añadir una capacidad artística absoluta; un importante compromiso con el arte nuevo, ese que, desde la sensatez creativa, está basado en la verdadera manifestación de la forma plástica. Porque hoy, cuando casi todo se deja a las arbitrariedades espontáneas y casi automáticas de las nuevas tecnologías, Dani Diosdado lo ajusta todo para que sus trabajos desprendan los argumentos sustanciales de lo que se sabe hacer, los postulados de una técnica bien estructurada y dispuesta para que, desde ella, la realidad quede transcrita con los nuevos planteamientos de una técnica realizada para desarrollar un arte al que él dota de infinita credibilidad.

Dani Diosdado es ilustrador, diseñador gráfico y autor de cómics que comenzó sus estudios superiores en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla para completarlos, más tarde, en la Politécnica de Valencia. Ha sido, desde siempre, un autor muy serio de los que sabes positivamente que en él puedes confiar pues es autor de un trabajo claro, abierto, que promueve la reflexión del que contempla la que es una obra serena, bien argumentada - técnica y conceptualmente - que abre las perspectivas para que, desde ella, el espectador se sienta cómplice de unas historias felizmente compuestas desde una idea clara y convincente. La obra de Dani Diosdado no ofrece duda; es personal e intransferible y goza, ya, de un estatus absoluto, con premios de mucha importancia -Mejor Dibujante del certamen Málaga-crea, el Primer Premio del certamen Jóvenes Creadores del Ayuntamiento de Madrid, Mejor Diseño para etiquetas Cerveza Artesana Destraperlo, el Premio ‘Vilustrado Internacional’ de Valladolid, la Beca Fronterasur de la Diputación de Cádiz, el Primer Premio, en la modalidad de cómic, Fernando Quiñones del Ayuntamiento de Cádiz, la Bienal de Jóvenes Creadores de Europa y del Mediterráneo de Nápoles, la Beca de producción artística ‘Art public 2003-2004 de la Universidad Politécnica de Valencia o la Beca Artifarity, I Encuentros de Arte en el Sahara, entre otros-. Hay que destacar, asimismo, la amplia cartera de clientes que posee, entre los que se encuentran empresas e instituciones tan prestigiosas como El País, The Wall Street Journal, The New Yorker, The Washington Post, Forbes, los Ayuntamientos de Jerez y Sevilla, La Caixa, la Fundación Cajasol, Lustau, González Byass, el Festival de Jerez , el Teatro Villamarta, por citar sólo algunos. Su realidad artística no se queda en un único planteamiento ilustrativo sino que amplía los horizontes como un ilustrador de muy amplio espectro lo que le permite trabajar en ediciones, publicidad, cartelería, audiovisuales... y cómic, como el conocido ‘Voy tirando’, que mereció el premio ‘Desencaja’ del Instituto Andaluz de la Juventud y le valió su posterior publicación.

Exposición de Dani Diosdado. Exposición de Dani Diosdado.

Exposición de Dani Diosdado.

En el amplísimo entramado artístico de Jerez, con autores de muchísimo calado, algunos participando en los planteamientos más selectos del arte español, Dani Diosdado ocupa, sin duda, un lugar de privilegio. Su obra constata tal afirmación. Una obra que descubre a un ilustrador que sabe lo que hace; poseedor de una técnica determinante y con un sobrio dibujo, que le sirve para afrontar una composición poderosa llena de color, sucintos episodios ilustrativos, llenos de gran esencialidad que dejan entrever los espacios de un concepto perfectamente distribuido para que posibilita felices encuentros con una realidad llena de encanto formal, proposiciones de fina ironía y gestos mínimos que encierran máximas ideas.

"Es un artista total, de una conciencia creativa absoluta, un lenguaje artístico superior, unas formas plásticas contundentes y una inteligencia artística sin límites"

Dentro de la edición ‘Trayectorias’, las jornadas que la Escuela de Arte de Jerez dedica al diseño, Dani Diosdado participa con una cuidada exposición, ‘Videoclub 92, un año de película’, en ella encontramos algunos de sus lúcidos y acertados planteamientos. A modo de una instalación - ahí se manifiesta el alcance creativo del autor -, además de un recorrido expositivo de muchos elementos conformantes, se nos introduce en algunos de los muchos sistemas ilustrativos que el ciudadano encontró en aquel año que, verdaderamente, fue de película. Muchas de las importantes cosas que ocurrieron en aquel 1992, de tan honda significación en el transcurrir de una España que, ya definitivamente, se abría a una Modernidad clara, son puestas en escena desde la sabia visión de un diseñador que estructura una realidad esencial con objeto de que abra sus máximos registros ilustrativos.

Termino manifestando algo que en todo este escrito he eludido porque sé que Dani Diosdado siempre lo afirma y con lo que yo no estoy para nada de acuerdo. Él, humildemente, dice que no es artista. En su contra, proclamo, porque así lo considero, que es un artista total, de una conciencia creativa absoluta, un lenguaje artístico superior, unas formas plásticas contundentes y una inteligencia artística sin límites. Es, pues, un artista artista.

Tags

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios