Tierra de nadie
Alberto Nuñez Seoane
Palabras que el viento no se lleva
La Navidad debería durar mucho más. La tranquilidad política que se ha vivido estos días permite recobrar la confianza en el futuro. No se puede calificar la situación como la que se canta en el villancico, paz en la tierra, porque en Ucrania la cosa se agrava cada día que pasa, en el norte de Europa miran constantemente al cielo porque los rusos se toman el respeto al espacio aéreo a título de inventario y Trump no da tregua a los que considera enemigos allá donde se encuentren y ha bombardeado Nigeria con el argumento de que el Estado Islámico persigue a los cristianos. El IE persigue a los cristianos y también a los musulmanes que no respaldan el terrorismo islamista.
Pedro Sánchez se ha cogido dos semanas de vacaciones, nunca tantas en Navidad; y los miembros del Gobierno, socios y dirigentes de la oposición le han copiado la idea. Durante unos días podremos respirar tranquilos. No se producirán títulares hirientes. Se celebrará el juicio que afecta a la mujer de Sánchez, también al de Gallardo y el hermano de Sánchez, y Ábalos, desde su celda, insistirá a su abogado para que le juzgue un tribunal popular.
Esta periodista no puede olvidar lo que respondió Pascual Sala cuando era presidenrte del CGPJ y del Supremo, en pleno debate sobre juicios populares a la pregunta de qué preferiría si tuviera que comparecer ante un tribunal; sin dudarlo, dijo que si fuera culpable prefería ser juzgado por un tribunal popular y si inocente por un tribunal de profesionales, le ofrecía plenas garantías.
Disfrutemos estos días de tranquilidad, la merecemos. El año ha sido duro, decepcionante, inquietante, tenso. Ha sido desagradable, con episodios que provocaban vergüenza y con un escenario plagado de personajes de quinta categoría, en lo político y en lo moral, que nos han llevado por la calle de la amargura, más allá de ideologías y simpatías personales. A nadie le gusta la idea de que en su país, su Gobierno y la mayor parte de sus instituciones, se den casos de corrupción y los principales medios extranjeros lleven las noticias a las primeras páginas, y no precisamente para bien. Sánchez se tomó vacaciones. Los españoles necesitábamos ese respiro. Vienen días difíciles, con elecciones autonómicas y negociaciones en Extremadura que nos van a dejar exhaustos.
También te puede interesar
Lo último