Sendero Cerro del Águila, en Sanlúcar: un recorrido de contrastes entre dunas, pinares, monte blanco y negro
Impresionante ruta circular, apta para todos los públicos en la que conectar con la naturaleza
Llega el tiempo de disfrutar del aire libre y de conectar con la naturaleza. Vivir en la provincia de Cádiz resulta todo un privilegio, por la diversidad de sus paisajes y las horas de sol. De modo que, busca hueco en tu agenda, coge mochila para llevar agua potable, calzado cómodo y vive tu gran momento de desconexión en la siguiente ruta.
La trayectoria del sendero Cerro del Águila es circular y de dificultad baja, apta para todos los amantes de la naturaleza. Sus 4,7 kilómetros se pueden recorrer en 1 hora y 45 minutos, aproximadamente. A lo largo de su recorrido hay un relieve poblado de pino piñonero, ejemplares de sabina y matorral. También es posible observar aves y mamíferos o disfrutar de las vistas desde las crestas de las dunas. Todo sin necesidad de solicitar autorización alguna.
Acceso
Desde Sanlúcar de Barrameda toma la CA-9027, en dirección norte a Bonanza. Pasada La Algaida, a unos 100 metros, se inicia el sendero. Existe un aparcamiento con capacidad para 30 plazas.
Sendero Cerro del Águila
El recorrido se inicia junto al aparcamiento, justo en la entrada del pinar desde donde la señalización nos dirige hasta la Laguna de Tarelo. Al salir del observatorio camina en dirección norte por el carril de la derecha para adentrarnos en el pinar. A continuación, el sendero llega a una bifurcación que dejaremos a la derecha para adentrarte en el bosquete de pinos de repoblación.
Este sendero es de contrastes. Por un lado hallas vegetación de tonalidades blanquecinas, es el monte blanco, mientras que a la derecha, se encuentra el monte negro.
En la siguiente bifurcación y a unos quinientos metros tomaremos el pequeño carril de la izquierda. Volveremos al sendero principal y continuaremos unos doscientos metros para girar a la izquierda hacia un terreno pedregoso cubierto de matas de romero. A continuación, el paisaje cambiará para dar paso a grandes pinos y sabinas.
El terreno se vuelve más ondulado en el pinar. En el próximo cruce seguiremos por el camino de derecha y, en el siguiente, por el de la izquierda, hasta llegar a una zona en la que se observan dos paisajes bien diferentes: a la izquierda una zona muy degradada de escasa vegetación; y a la derecha, pinar denso.
A unos trescientos metros aparece a la derecha una duna fósil cubierta de romero y sabina. Un nuevo cruce a la izquierda nos conduce por un camino flanqueado por pequeñas dunas.
Consejo
Es recomendable avanzar por la cresta de la duna hasta descender a un carril que discurre junto a la zona agrícola. Hacia la izquierda llegaremos a la zona de aparcamientos, donde finaliza el recorrido.
También te puede interesar