La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha celebrado este jueves la aprobación definitiva en el Congreso de la Ley de Garantías de la Libertad Sexual, conocida como Ley del sólo sí es sí. "Es un día de victoria después de muchos años de lucha", ha declarado Montero, tras agradecer su lucha en esta materia al "movimiento feminista" y, especialmente, a "las víctimas de violencias sexuales".

En rueda de prensa en la Cámara baja, Montero ha destacado que, con esta norma, el país "reconoce por ley que el consentimiento es lo que tiene que estar en el centro de todas las relaciones sexuales" y que, con esta norma, "ninguna mujer va a tener que demostrar que ha habido violencia o intimidación en una agresión para que esta sea reconocida como tal

"Reconocemos todas violencias sexuales como machistas y el Estado aporta un itinerario de atención integral y de reparación para mujeres víctimas de agresiones", ha añadido.

Para la ministra, el hecho de que "el grito feminista del 'sí es sí' y del 'hermana yo sí te creo' se convierten hoy en ley" es una muestra de cómo "el país feminista" que, a su juicio, es España, "se abre paso también en la arquitectura del Estado".

ABORTO Y TRANS ANTES DE FINAL DE AÑO

Esta iniciativa, además, se complementará "antes de que acabe el año", según las intenciones de Igualdad, con las reformas que ha impulsado este departamento en materia de aborto y con la Ley Trans y LGTBI.

Montero ha asegurado que en los próximos meses va a haber, en este sentido, "una actividad parlamentaria intensa" que, según ha señalado, se trabajará con los grupos parlamentarios pero, especialmente, con "la mayoría plurinacional, progresista y feminista" del Congreso y el Senado.

"Se darán todos los debates que se tienen que dar, pero sabemos que son leyes muy urgentes para garantizar derechos", ha apuntado Montero, que se ha referido tanto a las mujeres como al colectivo LGTBI.

A su juicio, si estas normas salen adelante, unidas a la Ley del sólo sí es sí, dejarán al final del 2022 "un avance legislativo feminista que seguramente no tenga precedentes" y situará a España "a la vanguardia" en materia de derechos de las mujeres y de las personas LGTBI.