El Xerez se juega algo más que tres puntos el sábado frente al Guadalajara en Chapín. Carlos Ríos lo sabe y lleva toda la semana pidiendo a sus jugadores concentración máxima de cara a un partido decisivo, por el que pasan prácticamente todas las opciones de seguir luchando por la permanencia con un mínimo de éxito.

El técnico sanluqueño tenía ayer preparada una intensa sesión de trabajo para sus jugadores en el Anexo de Chapín pero finalmente tuvo que cambiar de planes por culpa de la lluvia. Los azulinos entrenaron en el Palacio de Deportes y cambiaron el balón de fútbol por el de baloncesto y el de fútbol sala.

Álvaro Rey, Íñigo Vélez, José Mari y Adrián realizaron trabajo específico. Por contra, la nota positiva de la jornada la pusieron tanto Jesús Mendoza como Ogbeche, que ya trabajaron junto al resto de sus compañeros. El jerezano ha dejado atrás sus molestias en el tobillo y el punta, su faringitis.

Mientras, el guardameta Chema se retiró antes de cuenta del entrenamiento por culpa de unas molestias en el gemelo de su pierna izquierda.

De cara al importante choque ante los alcarreños, Ríos no podrá repetir once por tercera jornada consecutiva por la lesión de Iago y no ha desvelado si será David Prieto o Redondo el sustituto del defensa gallego.

Al jugar en casa y tener Redondo más salida de balón, es probable que opte por el sevillano junto a Ernesto Galán como centrales, con lo que Mendoza recuperaría el puesto en el once titular.

Los xerecistas tienen previsto trabajar hoy en Chapín, a partir de las diez, y será entonces cuando el preparador xerecista deje entrever sus intenciones de cara al sábado por la tarde.

Para el partido ante el Guadalajara, la plantilla se concentrará en el Hotel Montecastillo la misma mañana del choque de manera gratuita. El hotel, dados los problemas económicos de la entidad, ha decidido ceder sus instalaciones y la plantilla almorzará y descansará allí hasta un par de horas antes del choque.